La llegada de la Vuelta Ciclista a España a la Región de Murcia fue más agitada de lo previsto. La sexta etapa finalizó al sprint, en la localidad de San Javier, abarrotada de público para ver el paso de los ciclistas. El francés Nacer Bouhanni, del Cofidis, cosechó su tercer triunfo en esta carrera, después de ganar dos etapas en la edición de 2014. Sin embargo, parecía un día tranquilo para los hombres llamados a pelear la clasificación general, y tres de ellos se dejaron parte de sus opciones al podium: el francés Thibaut Pinot (Groupama-FDJ), el polaco Rafa? Majkay (Bora-Hansgrohe) y el holandés Wilco Kelderman (Sunweb). Los tres se quedaron cortados a 20 kilómetros de la meta y no pudieron recuperar su desventaja respecto a la cabeza de carrera. Por su parte, otro francés, Rudy Molard, del Groupama, conservó el liderato y el murciano Alejandro Valverde sigue en el quinto puesto de la general a 53 segundos en una jornada donde tuvo el contratiempo de sufrir un pinchazo a la salida de Cartagena.

La etapa, de 155 kilómetros, comenzaba en Huércal Overa, en la provincia de Almería, hasta finalizar en la localidad de San Javier, pasando por toda la costa murciana: Águilas, Mazarrón, Cartagena, La Unión y Los Alcázares. El perfil apenas presentaba dificultades para un pelotón que espera pacientemente que se desaten las hostilidades el próximo fin de semana, en concreto, el domingo, con el primer final en alto en La Covatilla.

Nada más arrancar la etapa, se formó la primera fuga de la jornada, en la que estaban Richie Porte (BMC), Luis Ángel Maté (Cofidis) y Jorge Cubero (Burgos-BH). Ninguno de ellos suponía el más mínimo problema para la clasificación general, a pesar de que Porte partía como uno de los favoritos al maillot rojo. El australiano, que abandonó el Tour de Francia por una caída, llegaba con dudas a la ronda española, perdió sus opciones ya en la segunda etapa de La Vuelta, y acumula más de media hora de retraso. Maté, líder de la clasificación de la montaña, acumuló 6 puntos más ventaja respecto a sus perseguidores en las dos cotas puntuables del día, el Alto del Garrobillo (3ª) y el Alto del Cedacero (3ª).

Se rodó lento, casi siempre por debajo de los 40 kilómetros a la hora. La fuga apenas alcanzó los 3 minutos ante un pelotón que tenía muy controlada la carrera, conscientes de que era una oportunidad única para los sprinters. El eslovaco Peter Sagan y el italiano Elia Viviani, que ya ganó la tercera etapa, esperaban pacientemente una llegada masiva. Con un perfil tan llano, la situación estaba absolutamente en manos del grupo principal.

El día anterior, Rudy Molard (Groupama-FDJ) se había colocado como líder de la clasificación general gracias a una escapada que llegó a buen puerto. El Sky de Michal Kwiatkowski se deshizo de la responsabilidad que supone cargar con el maillot rojo y la cedió durante unos días a otro ciclista que tarde o temprano cederá ese puesto.

A 30 kilómetros de meta, el pelotón cazó a los escapados. En ese instante, la carrera se agitó. En primer lugar, Alejandro Valverde fue víctima de un pinchazo que no le produjo mayores problemas.Al paso por La Unión, se produjo una caída en la cola del pelotón que dejó fuera de combate a Fabio Felline, Mike Teunissen y al Campeón de Europa de Contrarreloj, el belga Victor Campenaerts.

La caída fracturó el pelotón en dos y, además, cuando la carrera pasaba por El Algar, llegó el miedo a que se produjeran abanicos por el viento. Entre una cosa y otra, la carrera reventó en mil pedazos, con dos víctimas: Thibaut Pinot (Groupama-FDJ) y Wilco Kelderman (Sunweb). Tanto el francés como el holandés estaban entre los favoritos a la victoria final, y se quedaron cortados en distintos grupos a más de un minuto de la cabeza de carrera. Sus grupos se fusionaron, comandados por sus respectivos gregarios, pero ya era demasiado tarde para recuperar esa distancia respecto a un pelotón que marchaba a un ritmo frenético. Al final se dejaron 1 minuto y 44 segundos en la línea de meta.

Los corredores entraron en San Javier en un grupo reducido, pero con todos los aspirantes al triunfo de etapa: Elia Viviani, Peter Sagan y Nacer Bouhanni. El francés del Cofidis sorprendió a Sagan, triple campeón del mundo, que ni siquiera disputó el sprint. Viviani se quedó un poco encerrado, y en una llegada muy disputada, se le colaron el holandés Danny Van Popel (Lotto NL-Jumbo) y el propio Bouhanni, que suma su primer triunfo en esta edición y el tercero en La Vuelta en toda su carrera.

La carrera sigue su curso hoy con la séptima etapa, que parte de la localidad murciana de Puerto Lumbreras con destino a Pozo Alcón, en una jornada de 185 kilómetros.