La Región se lució gracias a la Vuelta a España y la Vuelta España encontró en nuestras carreteras el calor que en ocasiones le falta a los corredores. Aunque el pelotón siempre ha recibido el calor del público cada vez que ha pasado por la Comunidad Autónoma, en esta ocasión, quizás por su trazado junto a la costa, donde muchos apuran el final del verano, fue mayor, mucho más visible que en otras ocasiones. También pudo ser por haber promocionado mejor el paso de la ruta por sus localidades los ayuntamientos implicados, como Águilas, Cartagena -los bomberos del parque municipal realizaron un espectacular mosaico-, La Unión, Los Alcázares y, por supuesto, San Javier, donde se volcaron, trabajando desde hace muchas semanas para realizar un gran despliegue al que no le faltó ningún detalle. Incluso la Patrulla Águila, que está celebrando su 75 aniversario, se paseó antes y después de ser impuesto el jersey rojo de líder al francés del Groupama-FDJ Rudy Molard por la línea de meta, levantando los aplausos de los aficionados.
Las imágenes de televisión se aliaron en esta ocasión con la Región. Si en otras sirvieron para 'desprestigiar' el Mar Menor, ayer fue todo lo contrario. Pero no solo la laguna salada salió beneficiada, también la espectacular costa aguileña, las baterías de costa de Cartagena y las minas de La Unión. En todos los puntos se vio público, mucho, más que otros años, como en los 'pequeños' altos del Garrobillo y el Cedacero. Y en San Javier, hasta dos horas antes de que llegaran los ciclistas, pese a que el termómetro casi alcanzó los 40 grados de temperatura, buscando las sombras de los árboles, decenas de aficionados se congregaban en la avenida donde estaba la línea de meta, recordando a esas imágenes que se ven en los Campos Elíseos de París cuando allí acaba todos los años el Tour de Francia. En ese mismo escenario sanjaviereño, más de un centenar de niños de diferentes centros escolares del municipio, participaron en ese paseo con el que concluye un programa que ha durado un año y por el que han pasado unos mil seiscientos alumnos gracias a la Federación Murciana.
Pero no todo iba a ser positivo. En Mazarrón, donde viene de largo un conflicto entre el Ayuntamiento y la Policía Local, la organización se vio obligada a cambiar el trazado, no pudiendo pasar por el municipio, como estaba previsto. La carrera iba a atravesar tanto el caso urbano como el Puerto, pero la falta de efectivos para poder cubrir el evento provocó que la carrera se desviara por la RM 332 Mazarrón-Puerto, es decir, por zona cubierta por los 128 guardias civiles que trabajan en la carrera a diario. Para garantizar la seguridad en Mazarrón eran necesarios catorce agentes, pero el consistorio no tenía suficientes por el hecho de estar unos veinte en situación de baja por incapacidad temporal.
A la carrera no solo se acercaron aficionados. También estuvo el presidente de la Comunidad Autónoma, Fernando López Miras, quien siguió parte de la carrera en un coche de la organización. También estuvo la consejera del Deporte, Adela Martínez-Cachá, así como el delegado del Gobierno, Diego Conesa, y el senador por el PSOE Juan Luis Soto Burillo, un gran aficionado al mundo del ciclismo que ya el pasado año estuvo en Alhama.
También se dejaron ver otros rostros conocidos del deporte, como el exjugador de fútbol sala Kike Boned, en la actualidad director del Olimpic Club, una de las empresas ligadas a ElPozo Alimentación, que sigue poniendo con su patrocinio el acento murciano a la carrera, y que próximamente será anunciado como nuevo miembro del equipo directivo del club de fútbol sala; o el exciclista profesional Ignacio García Camacho. El ciezano, que fue campeón de España y ganó cinco pruebas como profesional, reside en la actualidad en la zona y trabaja en los juzgados de San Javier.
El ayuntamiento de San Javier estuvo representado por su alcalde, José Miguel Luengo, y la concejala de Deportes, Estíbaliz Masegosa. Además, ha contado con la estrecha colaboración de la facultad de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte de la Universidad de Murcia, bajo la coordinación de José María López-Gullón, que durante estos días ha realizado encuentas para conocer el impacto de la carrera en el municipio con la ayuda de voluntarios.
Al margen del incidente de Mazarrón, se vivieron dos momentos de tensión de los que nunca está exenta una carrera ciclista. Uno de ellos fue por una caída en las calles de La Unión, y el otro, por una ráfaga de viento que desplazó en la línea de meta dos vallas de seguridad y que provocó que varios corredores, cuando estaban enfilando el camino hacia los camiones de sus equipos, se fueran al suelo sin mayores consecuencias. No
