José Luis de la Rocha es un murciano de 47 años, que trabaja en régimen de autónomo y que posee su propio almacén de ferretería. Vive en la Plaza Circular, lo que toda la Región conoce como La Redonda, ese lugar en el que el murcianismo, cuando corresponde, se deja inundar por la pasión y la locura que solo le brinda el Real Murcia.

Podría parecer que José Luis es un murcianista más de los muchos que hay por la Región, de los que disfrutó en La Condomina junto a su abuelo de glorias pasadas, y ha sido invadido por la tristeza en Nueva Condomina tras las decepciones del último lustro. Pero José Luis no es un simple aficionado. Precisamente, de todos los momentos que forman parte de la historia del murcianismo, es un experto. O quien dice experto, podría decir todo un 'honoris causa' de las páginas de un libro tintadas por el color grana.

José Luis de la Rocha tiene como 'afición', según él mismo relata, agrupar piezas que cualquiera considerará «reliquias, joyas del murcianismo». Gracias a la inestimable colaboración y apoyo de la Fepemur, la cual representa Pablo Guzmán, y el Museo Barón de Benifayo de San Pedro del Pinatar, este murcianista de pura cepa podrá exponer entre los días 7 y 30 de septiembre una muestra de su imponente y exquisita colección 'made in Real Murcia'. Una colección que, según el propio José Luis, está compuesta por «doscientos» artículos distintos, entre los que se incluyen camisetas, jerséis de guardametas, espinilleras de futbolistas míticos y carteles de partidos históricos. Con todo ello, este murcianista elaborará una exclusiva selección de unas 35 o 40 piezas que cualquier interesado podrá contemplar, de forma totalmente gratuita, de lunes a domingo en el Museo Barón de Benifayo de San Pedro (9.00 a 14.00 horas).

Se tratará, sin duda, de un templo del murcianismo, en el que abundarán especialmente artículos de las décadas «más gloriosas» del Real Murcia, la de los 70 y los 80, en las que, según recuerda José Luis, «estuvimos ocho años en Primera División, nueve en Segunda, y quedamos campeones de Segunda en cuatro ocasiones».

Esta colección es un claro ejemplo de trabajo minucioso, en el que De la Rocha ha tenido que volcar un tiempo invalorable para documentar cada prenda, cada artículo, y saber la curiosidad que entraña cada prenda determinada. Es por ello que trabaja codo con codo con la Fepemur para que la exposición disfrute de visitas guiadas, para que todos los aficionados y curiosos puedan conocer de primera mano qué inverosímil historia entraña cada pieza.

Entre esa colección, los visitantes podrán encontrar, sobre todo, camisetas. La mayoría de ellas, de la década de los 70: «Se verán camisetas desde las primeras de monjal, de tela, rejilla, segundas equipaciones como la verde de la temporada 71-72, que no se ha visto nunca; la primera publicidad que tuvimos de Juver, o la primera de Cajamurcia; camisetas de jugadores como el Macho Figueroa, Güina, Manolo, Vidaña o Miguel Sánchez; jerséis de portero, de lana acrílica, de la 72-73 de Ojeda, y otra de la 73-74 de Ñito, que se las ponían tanto en invierno como en verano».

Pero ahí no acaba la muestra. José Luis relata que en su colección también se puede hallar una pieza de uno de los mejores jugadores que han pasado por el Real Murcia: «En 1924, José Samitier vino a jugar un amistoso con el Real Murcia. El fútbol entonces era semiamateur, a los jugadores se les contrataba para ganar un dinero extra jugando partidos por España. Samitier jugaba por entonces en el Barcelona, y en esas épocas, el Barça recibió una sanción de seis meses por parte del Gobierno sin poder jugar en ninguna competición oficial porque su afición pitó el himno español. El Murcia aprovechó esos seis meses de suspensión para traerlo aquí un partido, y se le recibió como un héroe en La Condomina. Se contrató a un equipo de Madrid, al que ganamos 5-2. Pues bueno, a través de un amigo hemos localizado a un familiar que nos ha prestado las espinilleras con las que jugó Samitier ese partido, y las vamos a exponer. Quizá sea el mejor jugador que ha pasado por el Real Murcia».

En todo caso, incluso hay más joyas históricas como esa: «La única vez que el Murcia ha puntuado en sus visitas al Real Madrid en el Bernabéu fue en la 73-74, que empató 1-1 con gol de Vera Palmes. Tenemos su camiseta del partido, y la expondremos junto a una camiseta del Madrid de esa temporada, con una foto del mismo partido, el único en el que el Murcia ha puntuado allí». Sin duda, la mejor forma de «rememorar los éxitos que tuvo el Murcia».

Unos éxitos por recordar que, para José Luis, deben convertirse en la principal apuesta del club grana: «Nuestra historia es lo que nos diferencia de otros muchos clubes». No deja ninguna duda: su meta es llegar a la sensibilidad del murcianismo.