Víctor Gálvez se muestra confiado en seguir al frente de la presidencia del Real Murcia pese a la resolución ejecutada el pasado lunes por parte del TAS a favor del empresario mexicano Mauricio García de la Vega. No obstante, el máximo mandatario grana no mostró el menor atisbo de duda en sus declaraciones durante el entrenamiento del primer equipo en Cobatillas, en relación con la propiedad del club, pese a que el tribunal ha reconocido que fue De La Vega el que adquirió el 84% de las acciones de la entidad murcianista de parte de Raúl Moro, expresidente. Ahora, en un plazo de cinco días, el Consejo Superior de Deportes (CSD) debe inscribir las acciones tras la sentencia del propio TAS, en teoría, a favor de De la Vega.

En todo caso, Víctor Gálvez manifestó ante los medios de comunicación que «el TAS y el CSD (Consejo Superior de Deportes) son entes independientes, el TAS decide de un contrato que hay firmado, y el CSD dirá quien tiene los títulos. Y yo creo, seguro, que el CSD no va a inscribir las acciones de Mauricio. Mauricio lo tiene fácil, tiene que querellarse contra Raúl Moro si se siente engañado», declaró. Además, reconoció haber «presentado mi escrito esta mañana (por ayer) en el CSD para que nos las inscriban a nosotros, que para eso tenemos los títulos. Yo he visto la sentencia, y a Raúl (Moro) le piden devolver las acciones a Mauricio, creo que se van a ir a la justicia, porque no puede devolver las acciones a Mauricio, porque los títulos comprados en una escritura los tengo yo. El TAS sabe que los títulos no los tiene Raúl», alegó en favor de su propiedad.

En ese orden intervino el director deportivo y portavoz del Consejo de Administración, Toni Hernández, confirmando que «hay jugadores que han renovado que ponían como condición, e incluso lo tienen en su contrato, que continuaban si Víctor Gálvez es el presidente». El propio presidente avisó de que «si yo me voy, muchos se irán también», e informó de que «Raúl Moro va a presentarse por la justicia ordinaria, todo se va a paralizar y esto va a tardar cuatro años en resolverse».

Precisamente, cuatro son los años que Víctor Gálvez se marcó como plazo para reflotar al Real Murcia dentro de su proyecto: «No me siento engañado por Moro, llegué por hacer un favor y para poner 90.000 euros, si no el equipo en Granada no habría jugado y habría hecho huelga. Al final me metí con todas las consecuencias en el club y no pasa nada, voy a apostar a muerte, igual que se lo he dicho a los jugadores os lo digo a vosotros».

Del mismo modo, en alusión a la plantilla murcianista, reconoció que siente el respaldo tanto del equipo como de la afición: «Les he dicho que tienen que jugar y olvidarse de lo que sale en la prensa, y dedicarse a meter diez goles en todos los partidos. Mañana los vuelvo a invitar otra vez como ayer en la playa, a bañarse y a comer. Los jugadores están perfectos, y con la afición no tengo queja ninguna». Víctor Gálvez se mostró en un tono más relajado al referirse a Mauricio García de la Vega, al que en ocasiones anteriores tildó de «golfo» y al que amenazó afirmando que le iba a «morder en la yugular». Esta vez prefirió un discurso más sosegado: «Es difícil que yo me siente con Mauricio. Esta mañana me han llamado para que me siente con él, he dicho que no quiero nada con Mauricio y no me voy a sentar con él». Además, también manifestó posteriormente que, en caso de trabajar con alguien, lo hará con inversores que aporten capital a la entidad con el objetivo de reducir la deuda: «Va a entrar un inversor que va a aportar unos dos millones y medio de euros».

Por otro lado, argumentó que García de la Vega no tiene prohibida la entrada a Nueva Condomina, «siempre que pague su entrada», aunque en el día de ayer se pudo avistar la presencia de un guardia de seguridad en los accesos a Cobatillas, en teoría, para impedir el paso al empresario mexicano. El propio De La Vega, por el momento, ha adoptado una política de silencio y aún no ha hecho declaraciones tras la sentencia del TAS a su favor.