El Real Murcia solo tiene un objetivo válido para la temporada 2018-2019. Ese no es otro que acabar como líder del Grupo IV y lograr por la vía rápida el ansiado ascenso al fútbol profesional. Víctor Gálvez, presidente del club, se ha encargado de subrayar el reto a diestro y siniestro, de hecho cada fichaje que aterriza en Nueva Condomina tiene claro a qué llega. Algo que también conoce perfectamente Manolo Herrero, técnico elegido para comandar el proyecto. La idea está tan clara, que los murcianistas, en un nuevo cambio de discurso, han reconocido que tirarán de chequera lo que haga falta, y todo para confeccionar una plantilla de las máximas garantías.

A falta de algo más de un mes para que comience la competición liguera, prevista para el fin de semana del 26 de agosto, el Real Murcia ya cuenta con doce nuevas incorporaciones, doce futbolistas que no han podido renunciar a la suculentos contratos que está ofreciendo Víctor Gálvez. Pero de esas doce incorporaciones que llegan para hacer al conjunto grana líder del Grupo IV y para llevarle de vuelta al fútbol profesional tras varios fracasos seguidos, ninguna procede de equipos que el pasado mes de mayo estuvieran en el bombo del sorteo de la fase de ascenso a Segunda. Todos y cada uno de los refuerzos murcianistas realizados por Toni Hernádez vivieron las distintas rondas del play off desde la televisión.

Los principales batacazos los sufrieron Dani Aquino, Héber Pena, Miñano y Dani Pérez, y es que pese a formar parte de plantillas obligadas a estar en los primeros puestos de sus grupos, todos ellos se quedaron fuera de los play off. Los dos primeros formaron parte de un Racing de Santander que se llevó la pañolada de un Sardinero decepcionado por tener que jugar un año más en Segunda B. Ese fracaso y los pitos de los aficionados fueron uno de los motivos por los que el murciano, uno de los más criticados, al considerar los seguidores que no había estado al nivel esperado, decidió cambiar de aires y aceptar la oferta del Real Murcia, regresando a la 'casa' en la que se formó.

Si los racinguistas fracasaron siendo quintos, peores fueron los casos del Hércules, de donde llega Miñano, o el UCAM, donde militó Dani Pérez. Tanto alicantinos como universitarios perdieron sus posibilidades de entrar entre los cuatro primeros demasiado pronto. El centrocampista alicantino fue prácticamente fijo durante toda la segunda vuelta, sumando a lo largo de la campaña 30 encuentros, mientras que el central sevillano jugó durante el curso 32 partidos (2.781 minutos). El UCAM de Dani Pérez acabó la liga en la séptima posición, a 8 puntos del play off. Todavía peor fue la trayectoria del Hércules, que terminó décimo, a nueve puntos del cuarto clasificado.

Con el resto de fichajes de los granas va ocurriendo lo mismo. El portero Mackay no solo no jugó el play off con el Racing de Ferrol sino que descendió a Tercera División. Titular en los 38 partidos ligueros con los gallegos, encajó un total de 53 goles, siendo el tercer portero que más tantos recibió en el Grupo I. El otro guardameta que ha llegado a Nueva Condomina, Tanis, procede del Melilla, equipo que con Manolo Herrero en el banquillo acabó quinto en el Grupo IV. Los granas también se han reforzado con dos jugadores del Atlético Baleares. José Ruiz y Julio Delgado llegaron a Mallorca para luchar por estar en la cabeza y tuvieron que pelear hasta el final por no descender. Finalmente ocuparon el puesto 14.

Sergio Maestre, por su parte, llega de un Badalona que solo levantó cabeza en la segunda vuelta del campeonato, aunque no fue suficiente para dar la sorpresa en un Grupo III plagado de gallitos. Los catalanes fueron octavos con 55 puntos, a cinco del cuarto clasificado.

Del mismo grupo llega a Nueva Condomina el delantero Manel Martínez. El barcelonés jugó hasta enero en el Lorca, para en el mercado invernal poner rumbo al Peralada, filial del Girona. Jugó 1.126 minutos divididos en 13 partidos, pero solo fue capaz de marcar un gol. El equipo gerundés cerró la liga en la novena plaza con 52 puntos.

El otro atacante en el que el Real Murcia ha confiado para este nuevo proyecto es el murciano Chumbi. El aguileño aterriza en Nueva Condomina después de un agridulce paso por el Lorca FC, equipo en el que sufrió dos graves lesiones que le han tenido parado más de un año y que no le permitirán volver a la competición hasta el mes de octubre.

Álex Corredera es el único de los fichajes granas que el pasado mes jugó play off, aunque no lo hizo para ascender a Segunda, sino para poder dar el salto a la división de bronce con el Almería B, algo que consiguió.