El UCAM Murcia se ha hartado de Góngora, y no quiere esperar más para verlo fuera de la entidad. El club universitario anunció a principios de verano que se mostraba abierto a dejar marchar a cualquiera de sus jugadores con contrato en vigor de cara a la próxima temporada, y la relación con el capitán, quien tiene contrato hasta junio de 2019, ha terminado por romperse de la peor forma. El UCAM, ante la negativa del jugador a negociar su salida del club, ha decidido despedirle al considerar que el futbolista no merece continuar en el equipo. Desde la entidad universitaria consideran que determinados problemas extradeportivos, de los cuáles aún no han trascendido más datos, y el bajo rendimiento del jugador durante la pasada campaña, son motivos más que suficientes para desear su salida.

De hecho, según ha podido confirmar esta redacción, diversas fuentes afirman que ni el cuerpo técnico, ni la directiva e incluso parte de sus compañeros quieren que el malagueño siga formando parte de la disciplina universitaria. Pese a que Góngora ha conocido las intenciones del club desde el primer momento, el jugador se niega a abandonar el UCAM de forma amistosa, reclamando el total del dinero correspondiente a su último año de contrato. Por tanto, este ´culebrón´ que ha venido fraguándose en los últimos días, no ha hecho más que comenzar y podría acabar, casi con total seguridad, en los juzgados.

No obstante, entre los motivos por los que el UCAM ha decidido prescindir de los servicios del que ha sido su buque insignia en las últimas cuatro campañas, se encuentra el tratamiento que el jugador hizo sobre la osteopatía de pubis que tantos problemas le ha causado en el último año y medio. Góngora, según concretan las mismas fuentes, ocultó información al club sobre la gravedad de su lesión, un problema que terminó por solucionarse tras pasar por el quirófano el pasado mes de diciembre. Además, según pudo saber este diario, el UCAM renovó a Góngora su contrato la pasada campaña frente a los deseos de su entrenador de entonces, Lluís Planagumá. Un movimiento que al UCAM, tras lo acontecido, ha terminado por salirle mal.

Por otra parte, el conjunto universitario inició ayer los entrenamientos de su pretemporada en La Condomina a las órdenes de Pedro Munitis. El UCAM trabajará también estos días en el Mayayo, y disputará el próximo sábado, a las 9.30 horas en el propio Mayayo, su primer partido de preparación frente a su filial. Hoy y el próximo jueves trabajarán en doble sesión.