Alberto Monteagudo era el símbolo del abatimiento de un equipo que se ha quedado, una vez más, a las puertas de la gloria. El entrenador de Valdeganga asume que no ha sido capaz de llevar al Cartagena a Segunda, que era su objetivo, y se lamenta por el infortunio que sufre el conjunto albinegro. «Creo que el fútbol nos ha castigado demasiado. Hemos perdido en la final, de pie», enfatiza el entrenador. El manchego puso en valor la labor de su plantilla y su capacidad para luchar por el ascenso una y otra vez. «Es un equipo para estar orgullosos. Es triste ver a los futbolistas llorar por algo que se ganaron por derecho propio. Nos recuperamos y no hemos sido capaces de llevarnos esto. El vestuario está hundido, pero el fútbol sigue», declaró el técnico.

De lo sucedido en los noventa minutos de juego, el preparador albinegro señaló que el Cartagena tuvo buenas ocasiones en la primera parte, y una clara de Rubén Cruz en la segunda. En el global de la eliminatoria, Monteagudo apunta que «aunque ellos fueron mejores allí, a lo mejor el gol que le anularon a Aketxe hubiera sido el del ascenso».

El técnico lamenta que varias circunstancias se hayan aliado en contra del Cartagena: la ausencia de sus dos pivotes defensivos, el bajón físico y la falta de gol justo en el momento decisivo. «Hemos competido bastante bien para cómo hemos llegado a este partido», destaca. Pero el factor determinante es que el equipo solo haya metido un gol en las dos últimas eliminatorias de play-off. «Hoy necesitábamos pegada y meter la primera que tuviéramos. No tuvimos pegada en Majadahonda ni la hemos tenido hoy. Esa es la gran diferencia entre ascender y no ascender», señaló Monteagudo.

El técnico cartagenerista ensalzó la gran eliminatoria de sus dos centrales (Josua Mejías y Míchel Zabaco), pero apuntó que echaron en falta un futbolista de corte defensivo en el centro del campo. «Chavero y Diego Benito han hecho un esfuerzo sobrehumano. Eso nos ha perjudicado en los dos partidos. A partir de ahí, la plantilla era larga pero se nos ha lesionado gente en el mismo sitio», dijo Monteagudo.

Después de ver como dos de sus futbolistas (Rubén Cruz y Chavero) acababan expulsados por dos entradas extremadamente agresivas, el entrenador lo atribuye a la impotencia de que se escapara el ascenso. «Hay que vivir esto. Además, los dos futbolistas que han visto la roja no estuvieron en Barcelona, yo sí», recordó. En cualquier caso, pidió disculpas a los futbolistas del Extremadura por la desmesura de esas dos entradas.

Monteagudo no aclaró si se ve con fuerzas de seguir adelante con el proyecto, y dice que solo siente «frustración» y «orgullo por ver a la afición del Cartagena tirando del equipo después del partido». «Si no hubiéramos peleado hasta el último momento, no nos hubieran aplaudido», apunta el técnico manchego, que aún así reitera que en el club no van a parar hasta llevarlo a Segunda División.

Echando la vista atrás, Monteagudo dice que no se ha parado a pensar sobre si se arrepiente de alguna decisión que haya tomado en este play-off. «De lo de Majadahonda. En Extremadura estuvimos muy mal. Contra el Celta competimos bien, y estoy convencido de que al 90% de los equipos los hubieran eliminado después de ese batacazo», manifestó. «Seguro que he tenido fallos en las alineaciones, en los cambios o en poner defensa de cuatro. Evidentemente tenemos que mejorar todos y yo el primero, porque no he conseguido el objetivo de ascender al Cartagena y ya llevo dos años y medio», añadió el técnico cartagenerista.

Sabas: «Me lo merezco»

El técnico del Extremadura, Juan Sabas, dedicó el ascenso, en especial, a aquellas personas que no confiaron en él en su etapa como entrenador. «Creo que me merezco este ascenso», dijo el ex jugador del Betis. Sabas apuntó que cogió al equipo sexto, sin depender de sí mismo para entrar en play-off: «La película acaba con final feliz».