La campaña de captación de socios que ha presentado este verano el Real Murcia tiene unos precios que se pueden considerar económicos a pesar de tratarse de Segunda División B, pero hay un dato que pone de relieve que algo ha cambiado en las oficinas de Nueva Condomina desde la llegada de Víctor Gálvez a la presidencia del club hace prácticamente dos meses. Por primera vez desde 2006, año en el que los granas se mudaron de la vieja a la Nueva Condomina, los precios de los carnés para los peñistas del club no son los más económicos de los que ha ofertado la entidad, ya que la apuesta para esta temporada ha sido la de premiar el abono de la grada lateral con el precio más bajo, los 60 euros que cuesta el carné en esta zona del estadio, una cifra inferior a los 65 euros que deberán de pagar los diferentes miembros de la Federación de Peñas Murcianistas (FEPEMUR).

A pesar de que el director general del club, Toni Hernández, anunció una campaña «agresiva» para tratar de llegar a los 15.000 abonados, la realidad es que el nuevo consejo de administración ha dejado en un segundo plano contra todo pronóstico a un sector que no se trata de ninguna broma, ya que la FEPEMUR representa a cerca de 4.000 seguidores granas, lo que traducido en carnés, en la situación actual del club, supone algo menos del cincuenta por ciento de los socios que viene realizando el club en los últimos dos cursos.

Además, en esta línea, los nuevos dirigentes granas tampoco han sido muy benévolos con el sector más fiel que tiene la entidad y que históricamente ha gozado de los mejores precios de todo el estadio, ya que al margen de los 65 euros del carné que le cuesta a cada peñista, después hay que añadirle otra cuestión que es, tanto la cuota que se desembolsa por pertenecer a una peña, como el desembolso anual que cada agrupación también tiene que realizar a la directiva, ponen si cabe todavía más de relieve que el abono de los que siempre están en primera fila, los que hace un tiempo eran los primeros en los que se pensaba al diseñar la campaña de abonos, no tengan en esta ocasión el premio histórico que vienen obteniendo de manera notable desde hace más de una década.

En la temporada 2006-2007, con Lucas Alcaraz en el banquillo y con el último ascenso a Primera que figura en la centenaria historia grana, el entonces presidente, el fallecido Jesús Samper, siempre defendió que el movimiento de los peñistas debía de fomentarse y de ampliarse, además de defenderlos como el mejor patrimonio de la entidad, por lo que puso en marcha por vez primera un abono peñista que pasaba a costar 100 euros para todos los miembros de las casi cien agrupaciones oficiales que ha llegado a tener la entidad, aunque ahora la cifra ligeramente supera las 80. La medida tuvo un éxito tan rotundo que, por si quedaban dudas, terminó de confirmarse el curso siguiente en Primera. Los peñistas del Murcia podían ver todos los partidos de curso en la Liga de las Estrellas por 175 euros cuando el carnés más económico que existía era el de 250 euros, un precio que obligó al club a verse superado y tener que poner el candado finalmente en el momento que los peñistas agotaron los carnés para el fondo sur del coliseo grana.

Además, del movimiento grana se esperaban un poco más de novedades hasta la fecha después de que el pasado 11 de mayo, tras unos años de silencio y sin elecciones en la FEPEMUR, llegó a la presidencia mediante la votación de las más de 80 agrupaciones el abogado Pablo Guzmán, una persona que ya formó parte de la directiva saliente, en la que Miguel Martínez ha estado más de una década al frente, y en la que Guzmán terminó imponiéndose en las urnas a José Almansa y Patricio Martínez, los otros dos candidatos que concurrieron a los comicios para tratar de ser la cabeza visible de los peñistas, un premio que finalmente recayó sobre un Pablo Guzmán que no ha demostrado mucha influencia en la directiva de Víctor Gálvez por el hecho de que, por primera vez en el nuevo estadio, los que han sido los 'niños mimados' del Murcia durante los últimos años, ya no gozan del carné más barato, a pesar de ser los que más acuden al campo, una cuestión que el trascurso del verano demostrará si afecta en mayor o menor medida a la afluencia habitual del fondo sur, ya que algunos ya han manifestado a través de las redes sociales su intención de irse a la grada lateral por el hecho de que les sale ligeramente más económico.

Además, para esta temporada hay que tener muy en cuenta al comprar el abono del Real Murcia que habrá Día del Club, es decir que los socios tendrán que pagar en una jornada de Liga, al mismo tiempo que el play off de ascenso, en caso de llegar, no está incluido en el precio inicial del carné, dos ventajas que han perdido de un plumazo los alrededor de 4.000 aficionados que conforman la FEPEMUR.