Después de que Toni Hernández completase su primer movimiento en el Real Murcia, el director deportivo deberá seguir tirando las fichas del dominó hasta el primer partido de la próxima campaña. La llegada de Manolo Herrero al banquillo murcianista inicia la segunda tarea del valenciano a cargo de la parcela deportiva en Nueva Condomina, que no es otra que comenzar a darle forma a la plantilla. Un plantel que el presidente Víctor Gálvez ya dijo que deberá luchar por la primera posición, aunque sin cometer las locuras económicas del pasado ejercicio con Raúl Moro al frente del anterior Consejo de Administración.

Y es que, el conjunto grana cuenta con un grueso importante de futbolistas con contrato en vigor para la próxima campaña. Sin embargo, las elevadas cifras firmadas en sus compromisos también les permite tener la puerta abierta para abandonar la Nueva Condomina sin mayores impedimientos. «Este club tiene jugadores con contrato en vigor que son muy interesantes para la categoría, pero como hemos repetido no le vamos a cerrar las puertas a nadie si tiene una oferta mejor y quiere abandonar el club», explicó el entrenador jiennense en su presentación. Un discurso que ha mantenido Toni Hernández desde hace unas semanas, cuando el Murcia quedó eliminado del play off de ascenso a Segunda División tras caer en el Martínez Valero ante el Elche.

El valenciano ya hablado con algunos jugadores para hacerles saber que le gustaría contar con ellos de cara al próximo año, pero renegociando la cantidad de su ficha para cortar la sangría económica en la confección de la plantilla tras los acuerdos desorbitados firmados por Deseado Flores hace exactamente un año. El portero Biel Ribas, el defensa Pedro Orfila, el delantero Pedro Martín y el central David Mateos no tienen asegurada su presencia en el nuevo proyecto, salvo que estén dispuestos a rebajar sensiblemente sus salarios. Tanto Toni Hernández como Manolo Herrero deberán sentarse juntos en los próximos días para empezar a peinar el mercado y dar forma a una plantilla que cuente con las garantías necesarias para mantener una línea constante entre los primeros clasificados.

No obstante, hace una semana ya se anunció desde el club que no se conocerían los detalles sobre las nuevas incorporaciones hasta que no se abonen los pagos que restan a los actuales jugadores de la plantilla grana. Y es que el club murciano deberá pagar en torno al medio millón de euros antes del 30 de junio tras las denuncias a la AFE (Asociación de Futbolistas Españoles).

«Son muchos los jugadores que quieren venir al Real Murcia», remarcó el pasado viernes Manolo Herrero, quien también incidió en que la «implicación» de los jugadores será la primera condición que pondrá para confeccionar la plantilla. El técnico andaluz aterriza en la Nueva Condomina tras firmar una buena campaña en el Melilla, en la que rozó el play off por el ascenso, y después de sus experiencias en clubes de considerable envergadura como el Hércules o la Ponferradina, aunque sin el final deseado.