El Cartagena está otra vez a un paso del ascenso. El guión era similar a lo que sucedió hace solo dos semanas en Majadahonda, pero esta vez el conjunto de Alberto Monteagudo sostuvo las embestidas del Celta B y se aseguró el pase para la tercera y última eliminatoria de play-off, en la que se medirán al Extremadura. El solitario tanto de José Gaspar, de falta de directa, mantiene vivo el sueño de los cartageneristas de subir a Segunda.

El Cartagena jugaba con un 4-4-2 bastante ofensivo, formado por Pau; Óscar Ramírez, Moisés, Josua, Jesús Álvaro; Aitor Ruibal, Chavero, Cordero, Gaspar; Aketxe y Rubén Cruz.

El Celta B, que repetía el once de la semana pasada, salió en tromba y tuvo una ocasión en la primera acción ofensiva del partido. Juan Hernández remató un centro en el segundo palo, y Pau tuvo que intervenir para desviar el balón.

Ante la avalancha celeste, el Cartagena cambió las tornas al adelantarse en el minuto 4. Una falta en la frontal del área de castigo ejecutada magistralmente por José Gaspar puso a los albinegros con ventaja en la eliminatoria.

Las malas noticias llegaron en forma de lesiones para el cuadro de Alberto Monteagudo. Miguel Ángel Cordero se tuvo que marchar en el minuto 18, y en su lugar entró Diego Benito.

Los albinegros mantenían la posesión, pero las embestidas del Celta B eran amenazantes, por su juego combinativo y vertical. En cambio, el Cartagena se imponía en cada acción a balón parado. Aketxe y Rubén Cruz tuvieron sus opciones de marcar de cabeza, pero no lo consiguieron.

En el minuto 40, los vigueses gozaron de su mejor ocasión del primer tiempo con un tiro del alemán Dennis. Ya en el tiempo de descuento, el guardameta Sotres realizó una gran estirada para evitar el tanto de Rubén Cruz, que había conectado un sensacional testarazo.

El Cartagena intentó coger el mando del partido en el segundo tiempo, pero lo perdió rápidamente. Brais dirigía las operaciones en el Celta B, que tuvo un par de oportunidades para marcar. Un tiro de Drazic y un testarazo de Dennis metieron el susto a los albiengros. Pero la mejor oportunidad del Celta B fue del propio Brais Méndez, con un disparo seco que Pau no fue capaz de atrapar. El rechace lo cogió el alemán Dennis, pero su tiro se le escapó por poco.

Con el conjunto vigués volcado, el Cartagena se defendió como pudo durante cinco minutos de descuento que se hicieron eternos. El pitido del árbitro coloca al Cartagena otra vez en el punto de partido, en el mismo lugar en el que estaban antes de medirse al Rayo Majadahonda: a una eliminatoria de la Segunda División. Esta vez el oponente será el Extremadura, al que han ganado las dos veces esta temporada.