El FC Cartagena tiene la oportunidad de atrasar el reloj unas semanas. Exactamente hasta el punto de poder regresar a una eliminatoria que le permita dar el salto a Segunda División, como ocurrió contra el Rayo Majadahonda. Los de Alberto Monteagudo, entrenador del cuadro albinegro, tienen la oportunidad de cambiar ese cruel final y escribir otro totalmente distinto al vivido en el Cerro del Espino aunque, para ello, primero deberán superar mañana al filial del Celta -a las 18.30 horas, ( BeIN Sports)- en el Cartagonova. «Tenemos que ganar el partido desde la intensidad y la seguridad para evitar salir como locos a por la victoria», explicó ayer el entrenador manchego tras el empate a cero del choque de ida.

Un resultado que provoca que al Cartagena solo le valga el triunfo, ya que en caso de empate a goles pasaría el conjunto gallego por el valor doble de los tantos marcados fuera de casa. Por eso, Monteagudo huyó ayer de la ansiedad en la previa del encuentro y el cuadro albinegro volverá a contar con el apoyo de su gente en un Cartagonova que todo hace indicar que se vestirá de nuevo con sus mejores galas. «No vamos perdiendo la eliminatoria, está empatada y el jugar en nuestro estadio nos debe dar un plus», añadió el entrenador albinegro.

«Debemos insistir en igualar la intensidad que el equipo tuvo frente al Rayo Majadahonda en nuestro estadio y encontrar la pegada que tuvimos en muchos partidos. De once encuentros en los que empezamos marcando ganamos», incidió el técnico y añadió que «una crueldad del fútbol nos dejó sin ascenso, pero ahora en casa tenemos un plus porque la afición está volcada y ayudará. Nosotros debemos dar la mejor versión en intensidad y en nivel futbolístico y ganar con nuestra gente para regalarnos la posibilidad de ascender». Monteagudo podrá contar con todos los efectivos de su plantilla, aunque las dudas volverán a estar en la defensa. Sobre todo en los laterales, donde Óscar Ramírez arrastra unas molestias musculares que le impidieron estar tanto en la vuelta contra el Rayo Majadahonda como en la semana pasada en Vigo y Jesús Álvaro también cuenta con dolencias además del golpe sufrido en el rostro ante el filial gallego. «Óscar Ramírez está algo justo pero está ya recuperado de su lesión. El que me preocupa es Jesús Álvaro, con una molestia rara en el abductor, y hay que esperar a ver cómo responde. Además, Josua Mejías lleva una semana arrastrado problemas en los isquiotiables, pero él dice que llegará a tiempo», explicó el técnico.

Sobre el rival, Monteagudo destacó que «seguramente desengancharán a tres o cuatro jugadores en ataque para buscar hacernos peligro» y que saldrán a buscar marcar un gol para poner en mayores dificultades a los albinegros al tener que estar obligados a ganar el choque para acceder a la última elimiatoria por el ascenso a Segunda.