Una semana más tarde de lo previsto, Víctor Gálvez se sentará ante los micrófonos para desvelar sus intenciones al frente del Real Murcia desde que tomó las riendas del club el pasado 11 de abril. El presidente del Consejo de Administración de la entidad grana citó a los medios de comunicación para el pasado jueves, sin embargo, un repentino viaje a Madrid obligó a retrasar la comparecencia hasta hoy, a las 12.00 horas, para exponer los ciminetos de su proyecto, que volvéra a tener el regreso al fútbol profesional como principal y único objetivo. No obstante, el empresario oriolano tendrá en las próximas semanas demasiados frentes abiertos antes de que la plantilla se vuelva a poner las botas y salte al césped para iniciar la pretemporada.

Y es que, quizá el pago de las nóminas pendientes a los jugadores que recientemente han finalizado el curso tras la eliminación del play off ante el Elche, es el asunto con más urgencia a tratar. Víctor Gálvez deberá abonar más de medio millón de euros, unos 600.000, antes del 30 de junio para que el club murciano no descienda a Tercera División. Las denuncias ante la AFE (Asociación de Futbolistas Españoles) por parte de los componentes del plantel grana ante una temporada plagada de retrasos en sus pagos, es el principal obstáculo que deberá sortear el empresario oriolano, quien ha pagado desde abril cuatro nóminas. Una herencia desproporcionada tras la mala planificación deportiva y económica por parte de Deseado Flores y Raúl Moro el pasado verano cerrando contratos con cifras desorbitadas y más propias de categorías superiores. Otro de los principales asuntos será el nombre del líder del banquillo grana. Antes de que el Elche dejara en la cuneta al Murcia a las primeras de cambio en la lucha por el ascenso a Segunda División, tanto José María Salmerón como Toni Hernández -director deportivo y general- deslizaron públicamente que sus posturas estaban cercanas para seguir de la mano tanto en un posible ascenso a Segunda como en Segunda B. Sin embargo, el partido del Martínez Valero lo cambió todo, y desde ese preciso instante el entrenador almeriense dijo que en el club «deberían cambiar muchas cosas» para asumir el reto otra temporada más.

En los últimos días ha trascendido que Salmerón no continuará a los mandos del banquillo del Real Murcia, por lo que sería sorpredente que Gálvez anuncie hoy su renovación. La incógnita, entonces, residirá en el perfil del técnico de la próxima campaña. En las dos anteriores ocasiones, el conjunto grana apostó por técnicos avalados por sus éxitos recientes en equipos con menos exigencias que en el Murcia, sin embargo, tuvo que dar un giro de timón a lo largo del año apostando por entrenadores más experiementados en este tipo de situaciones para terminar disputando el play off. Además, la llegada del nuevo técnico será el primer movimiento de Toni Hernández, quien aterrizó en la Nueva Condomina con el aval de la marca deportiva Hummel a finales de abril, en la secretaría técnica.

El valenciano ha hecho mucho hincapié en despertar a algunos aficionados granas desde la eliminatoria en el play off ante el Elche, por lo que otro de los interrogantes que se conocerán hoy será la campaña de abonados. Víctor Gálvez apostó por precios asequibles en la venta de entradas con el fin de que acudiera más gente al estadio, aunque ahora deberá decidir si continuar esa política para la campaña de abonados o en cambio mantener una línea similar a la de las últimas campañas. Eso también podría marcar el presupuesto del equipo. El oriolano, en sus primeras palabras ante los medios, afirmó en varias ocasiones que vendrían «los mejores jugadores y los mejores equipos del mundo porque el dinero no es problema», aunque Toni Hernández ha sido muy cauteloso sobre este asunto en sus últimas apariciones públicas y los granas podrían apretarse todavía más el cinturón tras una pésima gestión llevada a cabo por el Consejo que lideraba Raúl Moro.

Además, el último asunto a tratar será la deuda con Hacienda y Seguridad Social. En las últimas temporadas, los diferentes dirigentes que han pasado por la entidad han dejado de lado los pagos cotidianos al fisco. Lo que ha provocado que se incremente dicha cantidad. Víctor Gálvez aseguró en su último encuentro ante los medios que su intención era la de abonar un 10% de la deuda, un poco más de un millón de euros. Aunque a día de hoy poco ha cambiado en lo relativo a este asunto. Los movimientos de Gálvez también están sujetos al fallo que realice el TAS (Tribunal de Arbitraje Deportivo) en el conflicto entre Raúl Moro y Mauricio García de la Vega, lo que podría provocar un cambio de dueño en la entidad.