El empresario Mauricio García de la Vega, quien el pasado 7 de marzo ejecutó la opción de compra que tenía sobre el paquete accionarial en poder en ese momento de Raúl Moro, ha pedido calma y que no se tomen decisiones ni deportivas ni administrativas hasta que el Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAS) se pronuncie sobre la demanda presentada por el mexicano después de no reconocer el Consejo Superior de Deportes a Víctor Gálvez como propieratio del Real Murcia.

Mauricio García, que ha preferido mantenerse en un segundo plano para no interferir en la marcha deportiva del equipo, ha decidido, después de la eliminación del play off de ascenso, emitir un comunicado en que pide al actual consejo de administración, presidido por Víctor Gálvez, que no haga ningún movimiento que pueda perjudicar a la entidad si en unas semanas el Tribunal de Arbitraje Deportivo da la razón al mexicano y le sitúa como máximo accionista grana. Teniendo en cuenta que el TAS se pronunciará a finales de junio, De la Vega solicita que el actual consejo paralice cualquier decisión deportiva o extradeportiva hasta conocer la sentencia, para que así no se condicione de ninguna manera el proyecto de la próxima temporada.

Además, De la Vega también pide prudencia con relación a los créditos participativos. Y es que si Gálvez confirma que ha ingresado los 600.000 euros de los préstamos lanzados por el club, el jueves se convertiría en máximo accionista sin necesidad de esperar la resolución del TAS. Esto complicaría muchísimo más la grave situación institucional del Real Murcia, ya que si la justicia deportiva da la razón al mexicano, la pelea se alargaría en los juzgados, con las consecuencias que eso puede tener para un club que coquetea con la liquidación.

En un comunicado enviado a los medios que consta de cuatro puntos, De la Vega ha expuesto lo siguiente:

1º El pasado día 21 de mayo, me fue enviada una carta por parte del Consejo Superior de Deportes (CSD), en la que se me informa que se recibió la solicitud para la adquisición del paquete accionario de Real Murcia CF SAD. Se me informa también, que debido a las discrepancias sobre la eficacia de la ejecución de la opción de compra y por disposición pactada en el contrato firmado entre las empresas de D. Raúl Moro y un servidor, será el Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAS) quien emita una resolución respecto. Ante esto, el mismo CSD acordó SUSPENDER EL PLAZO de resolución de procedimiento hasta la recepción del laudo arbitral del TAS.2. Me encuentro convencido de que se realizaron todos los pasos legales necesarios para la adquisición del paquete accionario del 84% del Real Murcia CF SAD y que el TAS determinará su resolución en ese sentido, por lo que la legitimidad de quienes están ejerciendo las labores administrativas dentro del mismo, es seriamente cuestionada, ya que se han autonombrado "consejeros" en una junta de accionistas que, por demás, ha sido impugnada debido a la gran cantidad de irregularidades.3. Desde que decidí iniciar el proceso de compra del Club, he buscado actuar con prudencia y respeto. Aun cuando fui injustamente despojado de mis derechos de accionista mayoritario del Club, he dado prioridad a la imagen institucional del Real Murcia sobre mis intereses personales. De la misma manera, solicito a los miembros del "Consejo de Administración" se ABSTENGAN de celebrar contratos, préstamos participativos o incrementos al capital que pudieran ser desconocidos e impugnados por mi administración en un futuro.4. Confío plenamente en los mecanismos institucionales y creo que para bien de todo el Murcianismo, la resolución del TAS aclarará cualquier duda sobre quién es el legítimo propietario del Club.

Como ha informado este diario hoy, no será hasta finales de junio cuando la justicia deportiva se pronuncie, por lo que todo ese tiempo, el actual consejo de administración, que no ha sido respaldado por el CSD, debería seguir pagando facturas sin tener la seguridad de que van a seguir al frente.

Asimismo, Víctor Gálvez, presidente del club, ofrecerá el próximo jueves una rueda de prensa coincidiendo con el mismo día en el que el dinero de los créditos participativos que emitió el club se convierte en capital social. Así, el inversor que ingresase 600.000 euros, se convertiría de forma inmediata el dueño del club, ya que el paquete accionarial por el que pelean Raúl Moro y Mauricio García de la Vega quedaría prácticamente sin valor. Hasta el momento nadie ha aclarado si ha puesto o no los 600.000 euros pese a que la fecha máxima para ingresar el dinero era el 30 de abril.