A estas alturas de competición, el cómo es casi lo de menos. Alberto Monteagudo, el entrenador del FC Cartagena, tiene entre ceja y ceja afianzar el primer puesto el domingo ante el Écija a toda costa, y de paso celebrar como se merece sus cien partidos en el banquillo albinegro. «Queremos hacer un buen partido y dedicárselo a la afición, pero si no se puede hacer un partido vistoso, hay que ganarlo defendiendo bien porque el objetivo es ser campeón», manifestó el de Valdeganga 48 horas antes de la cita más importante de la temporada. Su equipo recibirá mañana a un Écija en apuros que también necesita la victoria para huir de la quema. La primera oportunidad de ser primeros la dejaron escapar ante el Linense. «El partido que hicimos en la Línea, el año pasado lo hubiéramos perdido. Aparte de tener mucha más pegada, llegamos de una manera diferente. El equipo tiene claro que, cuando no puedes ganar jugando bien, hay que intentar ganarlo de otra manera, o al menos empatarlo», señaló Monteagudo.

El preparador manchego alcanzó en La Línea de La Concepción los cien partidos desde que se sentó por primera vez en el banquillo del Cartagena. Monteagudo agradeció a la directiva la confianza depositada en su labor y en su continuidad. «Siento que estoy en un lugar donde los que mandan creen en el trabajo, en la mejora constante, en el sentarse y ver que se puede mejorar cada día. Soy un privilegiado», comentó el preparador manchego.

El de Monteagudo es un caso atípico en la categoría de bronce, donde el banquillo es una patata caliente que pocos sostienen más de una temporada. «En el fútbol todo es prisa. Llevamos cien partidos y hemos estado noventa y tantos en play-off. Hay presidentes que cambian de entrenador con esos números», indicó.

A pesar de la confianza de la directiva, parte de la afición ha cuestionado desde el principio sus decisiones. Sin embargo, Monteagudo dice que se siente valorado y asume que «en todos sitios hay voces críticas», sobre todo hoy en día por las redes sociales. «Creo que hay mucha gente en Cartagena que está contenta con el cuerpo técnico, por aspirar al primer puesto dos años seguidos. Podrá gustar más o menos la manera de jugar, que es atractiva, pero el ascenso va a ser para los que están con el entrenador y para los que han tenido dudas durante el trayecto», deseó el de Valdeganga.

Monteagudo agradeció la pasión de una afición que, con casi total seguridad, llenará el estadio el próximo domingo y lanzó un mensaje de optimismo a la hinchada: «Hay que ser positivos y pensar que va a salir bien. Este equipo en las grandes citas da la cara», dijo el técnico.

De cara a este último encuentro liguero, Monteagudo tendrá que lidiar con las bajas de Aketxe (por sanción) y de Cristo Martín (por su lesión en el tendón de aquiles). Hugo Rodríguez, que sigue con los mismos problemas en el isquiotibial, es la única duda para el técnico cartagenerista.

La lesión de Cristo abre las puertas del equipo a jugadores como Kuki Zalazar o Dani Abalo, que últimamente no han entrado en las convocatorias. «Son futbolistas muy queridos dentro del vestuario, que no tienen ni un solo debe», destacó el técnico, que justifica la poca participación de estos jugadores por la competencia que hay en ataque: «No es fácil elegir. Solo les digo que sigan, que pueden ir convocados y pueden jugar de titulares en cualquier momento», declaró Monteagudo.