La excelente racha con la que el UCAM CB Murcia saltó ayer a la pista del Gran Canaria Arena tras enlazar cuatro victorias consecutivas en la Liga Endesa sufrió un frenazo en seco. El conjunto universitario cayó en la casa del Herbalife (83-71) y perdió el 'basketaverage' ante un rival directo en la lucha por un billete para el play off por el título, por lo que en caso en caso de empate al término del curso, el cuadro murciano tendría la batalla perdida con su rival de ayer. Sin embargo, lo peor de todo fueron los daños colaterales con los que la plantilla de Ibon Navarro finalizó el encuentro.
El más grave fue la herida en la boca con la que Clevin Hannah finalizó el encuentro al recibir un fuerte impacto en el rostro propiciado por un rival. El base acabó con dos dientes rotos, como le ocurrió a Rojas en el Palau a principios del curso, y los médicos valorarán estos días si deberá ser operado para arreglar sus piezas dentales. La ausencia de Hannah en el primer cuarto, aunque más tarde volvió a la pista, coincidió con los primeros indicios del cortocircuito que sufrió ayer el UCAM ante el Gran Canaria. El conjunto amarillo supo cómo atacar en todo momento a la defensa universitaria y, sobre todo, la diferencia en el rebote -uno de los puntos fuertes del cuadro murciano esta temporada- fue abismal desde el inicio. Los locales finalizaron el choque con 41 capturas (16 de ellas ofensivas) por los 24 balones atrapó el UCAM al término de los cuarenta minutos. Además, el ataque de los de Ibon Navarro volvió a recordar al de fechas pasadas.
Volvió la ansiedad y la precipitación en varios momentos clave cuando en los intentos por acercarse al marcador, y la circulación de balón que había llevado al equipo murciano a contar todos sus partidos por victorias desde que cayera el pasado 18 de marzo ante el Morabanc Andorra, apenas existió. Aunque no fue un impedimiento para que el UCAM no le perdiera la cara al partido en ningún momento. Pero la guinda a todo ese cóctel fue un criterio arbitral a la hora de señalar las infracciones que sacó de quicio al UCAM durante todo el partido. Soko y Tumba, que acabaron el encuentro eliminados, tuvieron que lidiar en todo momento con una excesiva carga de faltas que condicionó las rotaciones del técnico vitoriano. Algunas de ellas, sobre todo las del último cuarto, fueron acciones muy rigurosas que castigaron desmesuradamente a los visitantes en Las Palmas y que marcaron el desenlace con el 'basket-average' en juego.
Sadiel Rojas, que también tuvo que medir sus impulsos al aguantar con tres y cuatro infracciones varios minutos, tuvo que desempeñar tareas de ala-pívot para tratar de frenar a un Báez que hizo mucho daño al juego interior. Mientras que en el lanzamiento exterior los universitarios tampoco encontraron la forma de hacer daño a la defensa canaria como ocurrió hace una semana ante el Betis. El UCAM acabó con cinco triples convertidos de 16 intentos y con un Oleson desquiciado con la máscara que tiene que portar tras sufrir una fractura en la nariz en Sevilla hace una semana y que le impide poder aportar su veteranía en ataque. Pero, las molestias que arrastran tanto Benite como Álex Urtasun tampoco ayudaron. Por eso Kloof y Hannah, pese al impacto en su rostro, fueron los que tuvieron que llevar las riendas en la anotación con 12 y 14 puntos respectivamente.
Desde los primeros compases del encuentro el UCAM estuvo irreconocible en defensa y permitió algunas facilidades al Gran Canaria. El equipo universitario comenzó a sufrir en el rebote, uno de sus puntos fuertes, pero aguantó los golpes del cuadro canario con un mate de Soko y una penetración de Rojas (6-4). Sin embargo, a partir de ahí, todo fueron problemas. Hannah y Tumba se tuvieron que retirar a los vestuarios al sufrir sendos golpes en el rostro que les obligaron a ser atendidos por los servicios médicos e Ibon Navarro tuvo que parar el partido para pedir a los suyos que movieran el balón con mayor rapidez en ataque. Un parcial de 9-0 provocó que el Herbalife se marchara en el marcador (15-6), y el UCAM, que acabó tan solo con tres canastas en juego en los primeros diez minutos, encontró en el tiro libre a su mejor aliado para mantenerse con vida (23-11).
El conjunto murciano llegó a ir perdiendo por 15 puntos de diferencia en el inicio del segundo cuarto, que arrancó con un 'alley oop' entre Kloof y Lima (28-15). Fue entonces cunado el base se echó al equipo a sus espaldas y tras anotar el primer triple consiguió obtener dos puntos más con una magnífica entrada a canasta para reducir la distancia (28-22). Las faltas de Tumba y Soko comenzaron a complicar todavía más el guión, aunque los de Ibon Navarro respondieron desde el perímetro con los triples de Benite y Hannah que le dieron otro mordisco al marcador (35-30). En esos momentos, con todos los problemas que tenía el UCAM, lo mejor era el resultado. Aunque un arreón de los locales hizo el partido todavía más cuesta arriba (42-30).
Casi sin hacer ruido, el conjunto murciano fue dándole bocados a la diferencia de puntos y se plantó a dos canastas de poder igualar el marcador con los puntos de Soko, Hannah y Oleson (50-46). Sin embargo, siempre faltaba algo más para que el UCAM pudiera consumar su remontada y en esta ocasión dos triples consecutivos de Oliver y Aguilar, completaron un tercer cuarto que cerró Urtasun (57-52).
Las eliminaciones de Tumba y Soko por faltas, la quinta del pívot belga muy rigurosa, marcaron el desenlace del encuentro. Un parcial de 10-2 hizo mucho daño a los de Ibon Navarro (72-59), pero aún así los universitarios no tiraron la toalla en el tramo final para intentar salvar el 'average' de cara a un posible empate al término del curso. Pero no tuvieron suerte (83-71).
