El Real Madrid venció al Brose por 106-86 y se enfrentará al Panathinaikos en los cuartos de final de la Euroliga, con el factor campo en contra, pues, pese a su victoria, la del Panathinaikos y la derrota del Olympiacos le condenaba.

De todas las opciones posibles en las últimas jornadas, la peor, la tormenta perfecta, fue la que finalmente sucedió. Victoria del Panathinaikos, en la prórroga en Milán, y triunfo del Zalgiris en la pista del Olympiacos, y también en la prórroga.

El Madrid, que tenía pensado jugar un partido importante en el que la victoria se pagaba con el cuarto puesto y el factor campo, pasó a jugar un encuentro on poco o nada en juego. Ganara o perdiera era quinto. Eso si, la victoria le enfrentaría al Panathinaikos y la derrota al Olympiacos.

Lo más positivo del partido fue la reivindicación de Randolph, que tuvo una actuación de MVP con 23 puntos (4-6 de dos, 4-4 de tres y 3-4 en libres), 5 rebotes, 4 asistencias, 5 recuperados y un tapón para 38 puntos de valoración.

El Madrid batió su récord anotador de la temporada y se enfrentará al Panathinaikos, aunque lo de jugar primero en Atenas no lo tenía previsto.

Real Madrid (27+26+29+24): Causeur (5), Randolph (23), Doncic (12), Ayón (14) y Taylor (6) -equipo inicial-, Rudy (10), Randle (4), Carroll (19), Yusta (3), Reyes (8) y Thompkins (2).

Brose Bamberg (28+22+19+17): Wright (11), Zisis (8), Mitrovic (3), Lo (7) y Musli (16) -equipo inicial-, Nikolic (3), Staiger, Olinde (5), Radosevic (4), Rubit (12) y Hackett (17).

Árbitros: Milivoje Jovcic (SRB), Ioannis Foufis (GRE) y Amit Balak (ISR). Sin eliminados.

Incidencias: Partido correspondiente a la trigésima y última jornada de la primera fase de la Euroliga disputado en el Palacio de Deportes (WiZink Center) de Madrid ante 9.468 espectadores. EFE