Por segunda semana consecutiva la actualidad del Real Murcia se ha centrado totalmente en el apartado institucional, donde la polémica entre Raúl Moro y Mauricio García de la Vega por hacerse con el control del club ha acaparado todos los focos. Por esta razón, José María Salmerón, el entrenador del equipo grana, quiere aislar a su plantilla de toda la controversia para que no se escape el play off de ascenso a Segunda División en las nueve jornadas que restan. «La dos partes, Raúl Moro y Mauricio García de la Vega, tienen prohibido hablar con los jugadores. Y los futbolistas tienen prohibido hablar con ellos hasta que no resuelvan sus problemas. Nosotros nos centramos en el partido, que es lo que le interesa al Real Murcia para intentar conseguir el objetivo. Los demás que resuelvan lo que que tengan que resolver. A nosotros solo nos preocupa lo que ocurra en el campo y que los jugadores cobren como cualquier otro trabajador», explicó ayer Salmerón en la rueda de prensa previa al encuentro de esta tarde, a las 16.00 horas (La 7TV) ante el filial del Granada. «Ellos son un equipo muy fuerte técnicamente que cuenta con grandes jugadores con gol y que acumula mucha gente por dentro. Pero también puede desequilibrar por banda y crear problemas. Va a ser un partido difícil porque ya vimos como le hizo daño al Cartagena la semana pasada y es un equipo a tener muy en cuenta», afirmó el técnico almeriense sobre su rival de hoy.