Felipe Mesones Temperán, quien fue futbolista y entrenador del Real Murcia y también dirigió a otros equipos como el Elche, el Betis, el Granada y el Cartagena, falleció en la noche del jueves a la edad de 81 años. Ayer, numerosas personalidades del mundo del fútbol quisieron dar el pésame a la familia del argentino. Al tanatorio de Jesús de Murcia se acercaron exmurcianistas como Manolo Álvarez, Canito y Antonio Zamora.

También estuvieron presentes José Luis Morga, expresidente de la Federación Murciana; Ricardo Martínez, directivo del Almería; Pedro Cordero, director deportivo del Lorca Deportiva, Luis Casas, segundo entrenador del UCAM Murcia, o Pascual Liza, empleado del Real Murcia. Todos ellos quisieron dar un último adiós a Mesones, cuya familia recibió ayer múltiples mensajes de ánimo de los clubes por los que durante su trayectoria pasó el de argentino.

Mesones, nacido en Buenos Aires, comenzó su carrera futbolística en su país militando en dos de los grandes clubes argentinos, el Boca Juniors y el San Lorenzo de Almagro.

Posteriormente siguió su trayectoria como jugador en Colombia, concretamente en el Independiente Santa Fe, club desde el que llegó a España en 1958 para enrolarse en el Real Murcia cuando el conjunto grana competía en Segunda División. Estuvo tres temporadas en La Condomina, todas ellas en la categoría de plata. Posteriormente este extremo de padres españoles pasó por el Levante, el Hospitalet y el Europa.

Una vez que colgó las botas empezó su carrera en los banquillos siendo su primer destino como entrenador el Mahón, entre 1968 y 1970.

Volvió al Real Murcia en la campaña 1972/1973 y en el cuadro grana permaneció durante tres años; logró el ascenso a Primera División y lo mantuvo en la máxima categoría durante dos campañas en una etapa en la que dirigió a algunos de los futbolistas más destacados en la centenaria historia de la entidad como Ojeda, Vera Palmes, García Soriano y Juárez.

Felipe Mesones regresó para dirigir al Murcia ya empezado el curso 1989/90 para afrontar nuevamente el reto de regresar a la elite, algo que estuvo cerca de conseguir en la campaña 1990/1991.

Todavía tuvo tiempo de vivir una tercera etapa como técnico murcianista, en la temporada 1996/1997, entonces en Segunda B.

Este profesional, que vistió la camiseta grana en más de 50 partidos, en los que marcó seis goles, se convirtió en el entrenador con más encuentros dirigidos en la historia del Murcia por delante de otros referentes como Eusebio Ríos y Vicente Carlos Campillo.