El agente de futbolistas mexicano Mauricio García de La Vega, un afamado representante del país azteca y que se dio a conocer en el panorama internacional desde la creación en 2001 de la empresa IconStar, desde la que se realizan trabajos tanto de asesoramiento y representación de futbolistas como de operaciones internacionales, se ha dejado ver últimamente en un par de ocasiones por la Nueva Condomina, desde donde fue fotografiado en una zona del palco el pasado domingo, en el choque que los granas empataron sin goles contra el colista, el Lorca Deportiva.

El nombre de Mauricio de la Vega cobró ayer todavía más fuerza por su posible vinculación con el Real Murcia después de que algunos seguidores reconocieran su cara porque, el mismo domingo, una mañana en la que algunos miembros de la federación de peñas del Murcia organizaron una especie de convivencia, también se dejó ver este representante al que algunos medios digitales de México definen como «una de las dos personas que maneja el fútbol mexicano».

La propia web de la empresa IconStar dice que se mueve «en cuatro principales áreas de negocio. Representación de Atletas, Marketing Deportivo y Venta de Derecho de usos de Imagen, Eventos y Organización de partidos internacionales», según la misma. El propio De La Vega, en una entrevista publicada en camarahungara.st, afirma que su empresa representa a 70 futbolistas en México. De su boca también sale la siguiente frase: «Antes el negocio se manejaba con agentes independientes, que de alguna manera se acercaban a los jugadores, se ganaban su confianza, los acompañaban y bucaban cómo conseguirles equipos. Hoy en día el negocio se ha sofisticado».

Al margen de que se trata de una persona muy conocida en el fútbol mexicano, tampoco existe mucha más información sobre un agente que, aunque por ahora se desconoce, su nombre ha aparecido ligado a lo que podría quedar establecido como nueva cúpula del club cuando Raúl Moro decida anunciar de forma oficial su salida de la entidad, aunque nadie descarta que pueda quedarse en un segundo plano. Demasiadas dudas para una afición que solo quiere pensar en el ascenso a Segunda División.