El UCAM CB Murcia se ha propuesto esta temporada romper con todos los límites posibles y el domingo volverá a tener una nueva oportunidad de hacer historia. El conjunto universitario visita al Real Madrid, a las 12.30 horas (Movistar +), sin complejos y cargado de confianza después de encadenar tres victorias consecutivas entre liga ACB y Champions League. El club murciano, que a finales de octubre consiguió asaltar por primera vez el Palau, tratará de aplicar la misma receta y llevarse así por primera vez el triunfo en la casa del otro ´gigante´.

De ser así, solo le quedaría por conquistar la cancha del Iberostar Tenerife tras casi 20 temporadas en la máxima competición. Será una misión complicada, pero no por ello va a arrojar la toalla antes de tiempo. «Sabemos que va a ser complicado, pero confiamos mucho en nuestro espíritu competitivo», afirmó ayer Ibon Navarro, entrenador universitario, y añadió que «somos conscientes de que hay que hacer las cosas bien y que el Madrid tiene tanta calidad que te puede matar, pero vamos a exigerles que vayan a tope y, si no lo hacen, intentaremos aprovechar la oportunidad».

El equipo universitario no podrá contar con el pívot Vítor Faverani, quien al igual que la semana pasada se ha quedado fuera de la convocatoria para seguir ganando ritmo después de sus esporádicas apariciones en la Champions League antes del parón, por lo que seguramente tampoco viaje con el resto del equipo para medirse el martes al Hapoel Holon en el torneo europeo. Los interiores Marcos Delía y Kevin Tumba serán, por tanto, los encargados de desconectar al juego interior del equipo de Pablo Laso y sobre todo al exNBA Walter Tavares. «Tenemos que intentar, con las armas que tenemos, moverlo y sacarlo de la zona para generar espacios y hacerle un partido incómodo. Va a ser complicado porque, a pesar de su estatura, cuenta con una buena movilidad, pero tenemos que trabajar pensando en que vendrán de jugar un partido complicado en Grecia en la Euroliga y tratar de que eso se vuelva en su contra», explicó Navarro.

«Intentaremos aprovechar las pocas fisuras que tiene el Madrid, pero sobre todo competir. Que es lo que hemos hecho siempre hasta ahora. Competir, llegar con opciones hasta el final e intentar aprovecharlas», añadió el entrenador vitoriano. El UCAM, además, se interpondrá por primera vez en el camino del base Facundo Campazzo después de que el argentino abandonase el club universitario tras disputar dos temporadas consecutivas en Murcia cedido por el Madrid. Aunque, lo que verdaderamente le quita el sueño al ´jefe´ del banquillo del UCAM es la manera de poder dosificar lo máximo posible a los suyos y mantener la misma intensidad en la pista. «A los jugadores que se quedaron aquí les sentó bien el parón por las ventanas FIBA, pero los que se marcharon hicieron muchos kilómetros y piden el cambio pronto, por lo que las rotaciones son cortas. Me preocupan todavía algunas situaciones porque no es algo que se pueda solucionar en una semana y, como es un aspecto nuevo en el baloncesto, tenemos que llevar cuidado porque llegar al final con la mejor chispa es también muy importante», concluyó ayer el técnico.