Un tuit desató la polémica el pasado martes. Raúl Moro, presidente del Real Murcia, anunció a través de esta red social que acudiría al encuentro del Murcia Baloncesto en Extremadura en lugar de ir al palco de la Nueva Condomina para presenciar el choque ante el Badajoz al considerar que el equipo de basket está más desprotegido. «Lo mismo hay que ir al equipo más desprotegido este fin de semana. Cierto que ayudáis y motiváis mucho al equipo y esta vez hay que ir al más desprotegido. El Basket y el bombo os necesitan. Yo iré a apoyar este fin de semana al Real Murcia Baloncesto», escribió el máximo mandatario del conjunto grana.

Unas palabras que no sentaron nada bien a muchos aficionados murcianistas que no dudaron en recrimar y contestar a Raúl Moro cuando el equipo que dirige José María Salmerón se encuentra en plena remontada para alcanzar las posiciones de la tabla que dan acceso al objetivo marcado desde verano. Quizá eso fue determinante para que el presidente grana cambiase de opinión a última hora y se quedase en la capital del Segura para presenciar desde el palco cómo el conjunto grana alcanzaba los puestos de play off de ascenso por primera vez en esta temporada, a la espera de lo que ocurra en el resto de partidos de hoy, con su victoria por la mínima ante el Badajoz.

Un palco en el que también estuvo presente el consejero Enrique López después de acudir a las butacas VIP en las últimas jornadas desde que se conoce próximamente abandonará el Consejo de Administración y al que se sumó también más tarde Stefan Settels, quien se encuentra en la misma situación. Cinco mil aficionados fueron los que vieron el encuentro en sus asientos y los que no dudaron en hacer una pausa en el ya famoso 'Black-weekend' dedicado a las compras navideñas, aunque, aún así, fue una entrada muy pobre después de la dinámica que ha enlazado el conjunto murciano con cinco victorias en los últimos seis partidos que le han llevado a pisar la parte alta de la clasificación. Al inicio del encuentro ambos conjuntos posaron con una pancarta en el día contra la violencia de género y en el que las mujeres entraron gratis al estadio como iniciativa.

No obstante, los jugadores del equipo grana también portaron una camiseta en la que se podía leer 'Ánimo Curto' para mostrar su apoyo al delantero, recientemiente operado tras sufrir una rotura parcial del ligamento cruzado de la rodilla. Aunque las lágrimas volvieron a aparecer, esta vez de alegría, en la cara de un Pedro Martín que después de varias semanas no sintió molestias musculares durante los minutos que estuvo en el césped según declaró a Onda Regional tras el duelo.