Como cada verano antes de comenzar la temporada, la familia del FC Cartagena integrada por la directiva, el cuerpo técnico y los jugadores tanto del primer equipo como del filial se desplazaron a la Iglesia de la Caridad para la tradicional ofrenda floral a la virgen. El Padre Montesinos, que dirigió la ceremonia, destacó la importancia de que el equipo lleve el nombre de la ciudad por toda España. Durante el acto se recordó al Padre Turpín, un sacerdota que estaba muy vinculado a la entidad cartagenerista y que falleció hace un año medio.

El director general del club, Manuel Sánchez Breis, destacó "el compromiso tan grande que tenía con el Cartagena". "Quiero decirle a la patrona de la ciudad que nos comprometemos con ella para intentar una vez más que el Cartagena, en junio, sea de equipo de Segunda División", dijo Breis durante la ceremonia.

A la salida, el capitán del equipo Juan Carlos Ceballos indicó que han completado una gran pretemporada y están preparados para iniciar la liga "a tope". En el plano individual, el jugador catalán fue relegado al banquillo el pasado curso por la llegada de Óscar Ramírez en el lateral diestro: "No jugué todo lo que hubiera querido, pero cada temporada las situaciones cambian. Si no hubiera tenido ganas de jugar no hubiera renovado", comentó Ceballos.