El tenista murciano Nicolás Almagro pasará el lunes por el quirófano para ser intervenido quirúrgicamente de una rotura de menisco interno en la rodilla izquierda. El jugador se tuvo que retirar en el encuentro de segunda ronda de Roland Garros frente al Martín del Potro tras caer lesionado en un lance del choque. Con lágrimas en los ojos y visibles muestras de dolor, Almagro puso punto y final a su participación en el torneo parisino, y ayer, ya en Murcia, fue sometido a un examen médico por parte del doctor Paco Martínez que arrojó como resultado una rotura del menisco que le tendrá apartado de las pistas durante al menos tres meses. Además, el jugador será sometido el lunes por la tarde a una intervención para reparar la zona dañada.

La misma rodilla izquierda que le obligó a retirarse de Roma cuando se enfrentaba a Rafa Nadal hace unas semanas, fue la que privó a Almagro de seguir adelante en París. Acababa de empatar a un set frente a un Juan Martín Del Potro que se llevaba la mano al abductor derecho cada poco y que renqueaba por la pista. Planeaba la duda de si podría continuar el argentino pero finalmente el partido se rompió por el lado más inesperado, la rodilla de Almagro.

El marcador rezaba 6-3, 3-6 cuando comenzó a sentir dolor. Se anotó su servicio en el segundo juego del tercer set ya con problemas, incluso con algún tropiezo y hasta ahí llegó su resistencia.

Empate a un juego en el tercero, sacó Del Potro y Almagro ya ni siquiera hizo ademán de responder. Se quedó parado, dobló el espinazo con las manos en la cara y se derrumbó. Silencio en la pista mientras acudían el árbitro y el propio Del Potro, un especialista en lesiones por las canutas que las ha pasado en los últimos años. No estaba contento el argentino pese a que de haber durado algo más el partido podría haber sido él quien tomara la puerta de salida.

Ahora Almagro tendrá que estar de nuevo durante un largo período inactivo.