Las enfermedades reumáticas infantiles son poco conocidas pero afectan a niños de todas las edades, aunque a veces se diagnostican tarde. Estas perjudican sobre todo a los huesos y articulaciones, pero algunos síntomas aparecen en la piel y los ojos y afecta tambien al corazón. El deporte en general es positivo para los que sufren esta dolencia, siempre que no se trate de una actividad agresiva que pueda resentir las articulaciones. También se fortalecen los musculos y por supuesto aumenta la confianza en los que la padecen produciendo un efecto psicológico muy positivo.
Entre las distintas asociaciones sin ánimo de lucro en torno a esta enfermedad se encuentra la murciana Pequereumamur, cuyo propósito es, entre otros, fomentar el conocimiento de las enfermedades reumáticas de niños y jóvenes, desarrollando actividades necesarias para mejorar la calidad de vida de los afectados, una de estas actividades es el aprendizaje del golf.
Todos los fines de semana, en el campo de golf de Altorreal, el profesional Pablo Gómez se encarga de enseñar a chicos pertenecientes a esta asociación los beneficios del golf para cuerpo y mente, ayudándoles en la superación de sus dolencias y haciéndoles pasar un rato divertido, promoviendo también la convivencia e intercambio de experiencias entre niños con un enemigo común. La escuela cuenta ya con 7 alumnos, de entre 10 y 12 años, en su mayoría chicas. «Esta enfermedad hace que los afectados tengan fuertes dolores a veces durante mucho tiempo; los considero pequeños héroes», declaró Pablo Gómez a La Opinión, que además de esta escuela dirige otra también en Altorreal con alumnos discapacitados.
Este proyecto ha sido posible gracias al respaldo económico de la empresa murciana Capitrans, S.L., que solidariamente y de la mano del Club de Golf Altorreal, consiguen con el golf dar fuerza a estos chicos para paliar su dolencia.
