El Fútbol Club Cartagena anunció ayer a mediodía la destitución de Víctor Basadre como entrenador del equipo filial después de conocerse que el gallego afincado en Murcia se ha comprometido para dirigir la próxima temporada al filial murcianista, de Tercera División. La noticia saltó cuando José Luis Acciari, hasta el jueves preparador del Imperial, presentó su renuncia al cargo a falta de una jornada para la conclusión del campeonato y después filtrarse que Basadre iba a ser su sustituto. El argentino declaró que había pactado con el club grana el anuncio de su marcha tras concluir este fin de semana la campaña en el grupo XIII, pero los acontecimientos se aceleraron y Acciari ni siquiera estará hoy en el banquillo en Águilas.

Basadre, por su parte, tenía un acuerdo desde hace tiempo con Deseado Flores, expresidente del Cartagena y en la actualidad director deportivo del Real Murcia, para llevar las riendas del filial pese a estar inmerso aún en plena competición. De hecho, el Cartagena B está clasificado para el play off de ascenso en la liga Philips Preferente, cuyo campeonato regular concluye mañana domingo con la visita de los albinegros al Molina Grúas La Variante. Los cartageneristas ya no se juegan nada puesto que tienen garantizada la tercera plaza y se enfrentará al sexto, que precisamente puede ser el conjunto molinense, en la primera de las dos eliminatorias por el asenso a Tercera.

El 'caso Basadre' es otro más en la lista de desencuentros entre Flores y Paco Belmonte, antes socios y que rompieron relaciones tras la salida del manchego del Cartagena.