Facundo Campazzo se propuso dos objetivos desde su llegada hace un año y medio. Llevar al UCAM CB Murcia lo más alto posible y al mismo tiempo convertirse en un jugador más completo. Y, a punto de bajar la persiana el 2016, el balance global del argentino no puede ser mejor. El base finalizó ayer la jornada 13 de la Liga Endesa como el jugador más valorado gracias a los 24 puntos, 6 rebotes y 7 asistencias, que le otorgaron un 36 de valoración en la victoria del cuadro universitario ante el Bilbao Basket. «Lo más importante es que el equipo no se acostumbre a perder, lo positivo es que después de esta mala racha ya paró de llover y los números son algo secundario», afirmó el argentino el pasado sábado en los micrófonos de Movistar + tras ser preguntado por su brillante actuación al término del choque.

Sin embargo, tan solo hay que echar un ojo a las estadísticas globales de la liga ACB para descubrir que Campazzo ya es un habitual entre los mejores de la competición. «Siempre trato de añadir cosas a mi juego para ser cada día un base más completo. Hoy me tocó a mí meter puntos, pero el próximo día le tocará a otro y así vamos a ser un equipo más poderoso», añadió el jugador a la plataforma que cuenta con los derechos televisivos de la Liga Endesa.

Y es que, es la tercera ocasión que el Facu llega a los 24 puntos esta temporada -también lo consiguió ante el Barcelona Lassa y el Iberostar Tenerife-, pero es la primera vez que sirve para que el equipo se lleve la victoria. El pasado curso, en su primera temporada en el UCAM cedido por el Real Madrid, tan solo logró superar ese tope de puntos en dos ocasiones -ante el Baloncesto Sevilla y frente al conjunto blanco en el play off-, lo que le convierte en un base todavía más letal cara al aro, pese a que todavía no ha encontrado su mejor versión desde el tiro exterior.

Campazzo, que se perdió un encuentro en la ACB por la fractura de los huesos propios de la nariz que sufrió el pasado mes de noviembre, se encuentra entre los diez mejores jugadores de la Liga Endesa con mejor valoración y ante el Bilbao Basket -con 36- superó su propia marca, establecida la pasada campaña en 33, frente al Morabanc Andorra y el Real Madrid en el play off. Además, el jugador de Córdoba también se sitúa entre los cinco mejores con mejor promedio anotador, aunque sus números no terminan ahí.

La capacidad del base a la hora de ver huecos que no existen y de completar pases imposibles para sus compañeros también le colocan como el segundo mejor asistente del campeonato, superado solo por Andrew Albicy del Andorra. No obstante, el argentino también ha mejorado notablemente a la hora de llevar las riendas del equipo, puesto que en este curso ya ha llegado hasta en tres ocasiones a los dobles dígitos en asistencias -ante el Manresa, el Madrid y el Betis-, situación a la que tan solo pudo conseguir una vez el pasado año en el choque ante el Estudiantes donde marcó su tope en la Liga Endesa con 15.

Los rivales ya conocen de sobra de que Campazzo hace con la misma sencillez tanto lo más factible como lo imposible, por lo que también se coloca como uno de los jugadores que más faltas recibe por partido. El argentino es consciente de que su juego en muchas ocasiones solo puede ser frenado con infracciones, por lo que también ha conseguido dominar sus números desde el tiro libre, donde actualmente mantiene su promedio de 75% de acierto que marcó la temporada pasada.

No obstante, a la hora de apretar los dientes en defensa también es el primero en hacerlo. El base del UCAM es el jugador de la Liga Endesa que más veces recupera la pelota por partido -unas dos por encuentro-, lo que hace que su energía y su electricidad también sea un arma potente desde la primera línea en defensa. Sin embargo, debido al número de balones que pasan por sus manos, se entiende que también sea el jugador que más balones pierde en una estadística en la que se encuentran varios de los principales bases de la ACB.

La segunda temporada de Facundo Campazzo en el UCAM Murcia está surtiendo el efecto deseado en el repertorio del jugador argentino. En la capital del Segura está realizando un curso acelerado en el baloncesto europeo, ya que el equipo universitario también sigue vivo en su primer año en la Eurocup con el base firmando unos números muy similares, y cada día que avanza, su objetivo de dominar cada parcela del juego está mucho más cerca.