Los responsables del Real Murcia presentarán en el día de hoy en el Juzgado de lo Mercantil 1 de Murcia la demanda con la que intentan conseguir la modificación del convenio de acreedores firmado en 2009 y que, ante las dificultades económicas del club, se ha venido incumpliendo en los últimos años.

Para hacer desaparecer cualquier riesgo de liquidación y amparándose en la reforma introducida en la Ley Concursal por el Real Decreto Ley 11/2014, el consejo de administración murcianista, presidido por Guillermo Martínez Abarca, remitirá a los juzgados la documentación necesaria, en la que se incluyen las adhesiones de los principales acreedores, para que la juez María Dolores de las Heras dicte una sentencia favorable a la entidad.

Aunque a finales de 2014 ya se intentó, en una propuesta que incluía quita, la falta de respuesta de los acreedores llevaron a la titular del juzgado de lo Mercantil 1 de Murcia ha rechazar la demanda presentada entonces por Jesús Samper. Ese 'no' llevó al entonces presidente murcianista a plantear otra opción, en la que se eliminaría la palabra 'quita'. Aunque fue el madrileño el que inició todo el proceso, consiguiendo el 'sí' del G-30 y de la Liga de Fútbol Profesional, su fallecimiento en diciembre de 2015 obligaba al nuevo consejo de administración a continuar con un proceso que tenía como fecha límite el 8 de septiembre -justo dos años después de la puesta en marcha de la reforma de la ley-. Después de reunir toda la documentación necesaria, los responsables granas iniciarán hoy de manera oficial todos los trámites, presentando en el Juzgado de lo Mercantil 1 de Murcia la nueva propuesta de modificación, con la que se ampliarían a cinco años los plazos para pagar la deuda. Aunque se incluirán las adhesiones de los principales acreedores que aparecen en el concurso, la juez, tal y como establece en el mencionado Decreto Ley, abrirá un período de diez días para dar traslado a otros acreedores de la petición de modificación, con el fin de saber «si aceptan o se oponen» a la petición murcianista.

Una vez conseguida toda la información, «el juez dictará sentencia aprobando o denegando la modificación del convenio en el plazo de 10 días. Solo podrá aprobar la modificación cuando las medidas propuestas garanticen la viabilidad del concursado». «Si se aprobase la modificación, sus efectos se extenderán a los acreedores con créditos privilegiados u ordinarios que no se hubiesen manifestado a favor de la misma y a los acreedores subordinados», se explica en dicha disposición transitoria.

Los responsables del Real Murcia, según explicaban ayer a esta redacción fuentes del club grana, son optimistas y confían en que en esta ocasión la modificación del convenio de acreedores sí saldrá adelante, lo que permitirá a la entidad darse un respiro económico y despejar de una vez por todas cualquier riesgo de liquidación.

Si finalmente la juez autoriza la modificación, en Nueva Condomina se ganarían cinco años para pagar la deuda. Además, uno de los puntos más importantes incluido en la propuesta es que mientras que se juegue en Segunda B, una categoría en la que no hay ingresos, el Real Murcia no tendría que abonar ninguna cantidad. De ascender a Segunda, el porcentaje a desembolsar cada año sería de un 20%, mientras que si se llega a Primera División, la entidad pagaría toda la deuda en solo una campaña.