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El gran hándicap con el que suelen contar la mayoría de los entrenadores que dirigen a los equipos de Segunda División B es el enorme esfuerzo que hay que hacer pretemporada tras pretemporada para armar un equipo en el que más del 50% de los efectivos es nuevo y deben sintonizar en un mes y medio para estar listos en el arranque de la temporada. Los contratos en esta división no suelen ir más allá de una campaña, lo que convierte en volátil el paso del futbolista y la inestabilidad es la tónica habitual en cada club, ya sea el que lucha por estar entre los mejores o el que trata tan sólo de mantenerse en la categoría. Las renovaciones y las ampliaciones de contrato son, por tanto, poco frecuentes, por lo que lo ocurrido esta pretemporada en el FC Cartagena es de lo menos usual que ha sucedido en la entidad desde que aterrizara en Segunda División B.

Seis futbolistas renovados y cuatro con contrato en vigor hacen que casi el 50% de los efectivos con los que debe contar Alberto Monteagudo ya tengan pasado albinegro y, además, hayan demostrado en la entidad cartagenerista unas aptitudes dignas de seguir en el club.

Limones, Jesús Álvaro, Moisés, Gonzalo Verdú, Cristo Martín y Juanlu Hens han decidido prorrogar su vinculación contractual otra campaña. Además, Ceballos, Sergio Jiménez, Sergio García y Chus Hevia tienen contrato en vigor, a los que hay que añadir también Álex Jiménez -la continuidad de este último no está clara-, lo que hace prever que para el preparador albaceteño todo va a ser mucho más fácil en esta pretemporada, no sufriendo ese periodo de adaptación y aclimatación que en muchos equipos perdura demasiado tiempo o en algunos casos no termina tan siquiera de funcionar.

En las últimas ocho temporadas, incluidas las tres que militó en Segunda División, tan sólo en una oportunidad superó el número de jugadores que continuaron de la 09/10 a la 10/11, un total de once, una cifra, que, dicho sea de paso, podría igualar el actual Fútbol Club Cartagena si al final el cántabro Quique Rivero da el sí definitivo para su continuidad en el club.

En el resto de los casos, el número de futbolistas que renovaban no superaba los cinco. Curiosamente, el año que el FC Cartagena logra el ascenso -temporada 08/09-, los dirigentes albinegros tan sólo se quedaron con cuatro jugadores de la temporada anterior -Óscar, Leo, Mariano Sánchez y Cabrejo-, lo que supuso que Fabri -el técnico en ese momento- tuviera que recomponer un equipo con hasta 17 caras nuevas. En ese caso, todo le funcionó, porque no ya con Fabri sino con Paco Jémez, el FC Cartagena logró el ascenso en Alcoy en mayo de 2009.

Siete ´Héroes de Alcoy´

Un año después, hubo limpieza y de los denominados ´Héroes de Alcoy´, apenas quedó rastro. Renovaron Rubén, Castilla, Txiki, Mariano, Héctor Yuste, Falcón y Tato, a pesar de que la campaña efectuada por el equipo fue la mejor de todas cuantas ha llevado a cabo el club en la categoría.

En Segunda División todo cambia, no solo porque el FC Cartagena hace un primer año espectacular, acabando quinto, sino porque los contratos tienen en muchos casos dos o tres años de duración. De esta manera, en la temporada 10/11 se mantienen hasta 11 futbolistas respecto de la anterior, una cifra que desciende a 8 en la temporada siguiente, la del descenso.

Una vez que el FC Cartagena regresa a la Segunda B, los dirigentes no mantuvieron nunca el bloque, como tampoco fueron capaces de hacerlo con el entrenador. Tres jugadores se quedan tras el descenso y solo cinco la segunda temporada en la categoría.

El pasado año fueron tres los efectivos que renovaron en la etapa de ´Sporto Gol Man´ al frente de la entidad cartagenerista. Fueron los casos de Limones, Tarantino y Sergio Jiménez, mientras que una vez que es Paco Belmonte el que se hace cargo del club logra convencer a Limones, Ceballos, Luque, además de Sergio Jiménez -con contrato en vigor-, para que se queden a pesar del mal año anterior.

Con diecisiete caras nuevas en esta última temporada, el Fútbol Club Cartagena hace una más que discreta competición, pero curiosamente el equipo deja un buen sabor de boca, gracias a sus números en el tramo final de la competición, justo en el momento en el que llega al banquillo albinegro Monteagudo.

Es por esto por lo que Paco Belmonte -encargado de efectuar las contrataciones- decide que los que mejor nota han sacado repitan, lo que ha supuesto que sean seis de momento los renovados, más Sergio Jiménez -que renovó en enero- y el entrenador albaceteño -quien también continúa un año más-, para un proyecto que tratará de ser tan ambicioso como el año pasado, aunque con la seguridad de saber qué futbolistas tienen en su plantilla y qué rendimiento son capaces de dar sin llevarte desagradables sorpresas.

Parte del trabajo está hecho por ahora, pero ya se sabe que esto del fútbol no suele ser una fórmula matemática y las cuentas no siempre salen.