Javier Gómez Noya agrandó ayer su leyenda al ser merecedor del Premio Princesa de Asturias de los Deportes 2016 por su brillante palmarés y sus valores de esfuerzo y perseverancia, según destacó el jurado. Pero, además, está estrechamente ligado a Fuente Álamo, cuyo Ayuntamiento decidió hace dos años dar su nombre al pabellón polideportivo de la localidad.
Cuando el triatleta gallego era un desconocido y se iniciaba en esta modalidad deportiva, Gómez Noya participó en el Triatlón de Fuente Álamo, una cita que ha ganado en dos ocasiones, en 2009 y 2014. «Fuente Álamo es especial. El ambiente que se vive aquí no se respira en ningún otro sitio. Desde que en 2001 estuve aquí por primera vez, quedé enganchado con este trialtón», afirmó en abril de 2014 el deportista en un acto que se celebró en el Ayuntamiento y donde recibió un baño de masas.
Gómez Noya mantiene un fuerte vínculo de amistad con el director general de la prueba, Ginés Bermúdez, quien ayer se mostraba orgulloso porque «si hay un deportista que merece este premio en España es Javi Gómez Noya», dijo a esta Redacción.
El Triatlón de Fuente Álamo ha cumplido este año 27 ediciones y se trata de una de las pruebas con más solera a nivel nacional. Se ha ganado una gran fama entre los deportistas por el ambiente de camaredería que se respira en el mismo, ya que la mayoría de los participantes duermen la noche anterior a la cita en el pabellón que hoy lleva el nombre de Gómez Noya. d. g. g.
