Francis Sánchez, técnico auxiliar del UCAM Murcia, vivirá hoy probablemente su partido más especial de la temporada. Malagueño de nacimiento, se sentará en el banquillo del Martín Carpena junto a Fotis Katsikaris. En las gradas no le faltarán familiares ni amigos. Pero, sobre todo, tendrá la fortuna de poder decir que su hija Martina, con leucemia desde el pasado mes de septiembre, también podrá seguir el partido desde una de las localidades del pabellón de Málaga.
Una noticia que solo se puede explicar por la mejoría de la pequeña, cuya recuperación está cumpliendo los plazos previstos. Pese a que en octubre Sánchez anunció que dejaba momentáneamente su cargo como ayudante de Katsikaris para volcarse en el cuidado de su hija, el malagueño ha podido reintegrarse a la disciplina del equipo de manera paulatina. El exalero ha continuado siendo, a todos los efectos, entrenador ayudante del UCAM Murcia. Sólo que sus partidos más importantes pasaron a jugarse en el Materno Infantil de Málaga, en el área de Oncología. Cambió la pizarra por las mascarillas y los pasillos de los vestuarios por los del centro hospitalario. Puso su vida al servicio de la pequeña Martina, que fue asimilando bien el tratamiento y respondiendo de forma satisfactoria, para alegría plena y felicidad mayúscula de todo el mundo.
Y la vida le va a regalar la presencia de su hija Martina en la grada del Palacio de los Deportes. «La doctora le ha permitido que esté presente en el Carpena. Sólo nos ha dicho que tiene que llegar pronto, antes de que haya mucha gente, y que debe salir después de todo el bullicio», dice. Martina verá a papá en acción.
