Hasta la fecha, el técnico del UCAM Murcia CF, el almeriense José María Salmerón, ha podido presumir de la amplitud de su plantilla tras rebasar el ecuador de la temporada. Tanto en defensa como en el centro del campo y en la delantera, el equipo universitario goza de recambios de garantías, especialmente tras los refuerzos llegados al plantel murciano en el mercado invernal.

No obstante, la portería entraña una cuestión llamativa. Los implicados son Miguel Escalona, el ya exportero universitario Luisma Tovar, el guineano Buba, el canterano Ginés y el último en llegar, Biel Ribas. Y es que a pesar de que Salmerón ha podido contar o disponer de muchos efectivos, solo han participado en compromiso oficial tres guardametas distintos de los cinco que han formado parte de la plantilla, y dos de ellos a causa de la lesión de Miguel Escalona, que le apartará de los terrenos de juego alrededor de tres o cuatro meses. En el inicio del curso, el portero riojano partía como el teórico titular. Por lo general, en los primeros tramos de la temporada se suele dar la oportunidad y cierta confianza a alguno de los guardametas suplentes, ya sea en Liga o en Copa. En el UCAM, no ha sido el caso.

Escalona completó todos los partidos de Liga de la primera vuelta, además de las dos eliminatorias de Copa, y al sobrepasar el ecuador de la temporada resultó lesionado durante un entrenamiento. 21 partidos, catorce goles encajados, y 1920 minutos después, ya que el riojano lo jugó absolutamente todo hasta la fecha, el equipo universitario encontraba su guardián en otro huésped de su plantel.

Asimismo, la situación ha dado muchos giros de tuerca. El suplente de Escalona, hasta que también se lesionó en la muñeca, fue Luisma Tovar. El sevillano aguardó su oportunidad hasta mediados de noviembre, momento en el que cosechó esos problemas en la extremidad derecha. Tras esto, Buba regresaba tras la recuperación de otra grave lesión, en este caso en su rodilla, causada en la última jornada del curso liguero 2014/2015 ante el El Palo. El nuevo suplente era el portero guineano, que masticó sus opciones hasta que se produjo la baja de Escalona. Con el propio Escalona fuera, y Tovar lesionado, fue Buba el que asumió el mando, con el canterano Ginés como suplente, y cuajó una buena actuación ante el Sevilla Atlético (derrota del UCAM por 1-0).

Tras este encuentro, la directiva universitaria oficializaba la contratación de Biel Ribas, procedente del Numancia de Segunda División, para ocupar la vacante dejada por Escalona. La de Ribas fue la ficha que volvió a tumbar y remover las demás que conforman este intrincado dominó. El nuevo guardameta, en su primera oportunidad, es titular (en la victoria ante el Almería B, 2-0) para derivar en lo siguiente: Buba vuelve defenestrado al banquillo a pesar de su buen papel; Ginés retorna de nuevo al equipo filial; y se provoca la salida de Luisma Tovar, sin llegar a debutar oficialmente, con la carta de libertad bajo el brazo para firmar finalmente con el Villanovense.

Probablemente se esperaba un mayor protagonismo, aunque no excesivo, por parte de los distintos implicados. Si no al menos, una participación oficial de Luisma con la camiseta universitaria; o la permanencia de Buba en el once una jornada más tras su buena actuación ante un equipo fuerte como es el Sevilla Atlético, y más en un escenario propicio como era el duelo del Almería B para el UCAM, en casa ante un equipo situado en descenso. No obstante, y vistas las actuaciones de Biel Ribas, que únicamente ha encajado un gol tras cinco partidos disputados con la elástica del UCAM, éste será el nuevo amo y señor de la portería universitaria hasta final de temporada, salvo nueva hecatombe en forma de lesión.