Finalmente se vino de vacío el Plásticos Romero de Barcelona tras caer derrotado por 5-2 ante el filial azulgrana. Un partido que comenzó muy bien para los de Guillamón, pero la intensidad en ataque del Barcelona terminó imponiéndose a la defensa visitante. Ahora toca esperar a la próxima semana donde Plásticos Romero va a recibir al conjunto gallego de O Parrulo para conseguir tres puntos vitales que le deben servir para mantenerse en la plaza de ascenso directo.

El debut del recién incorporado guardameta Chico fue la primera sorpresa de la alineación que dispuso Juan Carlos Guillamón en el cinco inicial del Plásticos Romero, en la que también tuvo presencia sobre la cancha el cierre Víctor, otro jugador de los fichados en el mercado de invierno, así como la reaparición del pívot Rubén Zamora.

El Plásticos Romero era consciente que tenía que dar primero en este compromiso para tratar de desequilibrar la templanza azulgrana ante la mala racha por la que atraviesa el equipo local. De hecho, Elián inauguró el marcador poniendo un 0-1 que daba serias esperanzas de sumar los tres puntos.

A pesar de la ventaja mínima, el partido no había hecho nada más que empezar y ninguno de los dos equipos perdió la compostura donde la escuadra cartagenera se dedicó a esperar a los azulgranas en su medio campo para tratar sorprender a la contra.

Pero nada más lejos de la realidad porque la insistencia azulgrana se hacía notar con más fuerza conforme pasaban los minutos, obteniendo su fruto a los nueve gracias al gol de Alvaro López que equilibraba el choque a un tanto.

En los últimos diez minutos antes del descanso, el control del balón fue para un Barcelona que contó con varias ocasiones claras para marcar sin conseguir perforar el marco defendido por Chico.

Tras la reanudación, el Barcelona siguió apretando en ataque disponiendo de la mejor ocasión a los 22 minutos donde Plana estrelló el balón en el larguero sin rebasar la línea de gol. Por su parte, Plásticos Romero intentó reaccionar durante unos instantes logrando controlar el ritmo del partido, pero la escuadra local supo arrebatar el balón y seguir con la tendencia de crear continuamente peligro.

A los 28 minutos llegó la jugada en la que fue expulsado el guardameta del Plásticos Romero, Chico. Esta circunstancia de superioridad numérica fue muy bien aprovechada para el Barcelona logrando adelantarse en el marcador con el tanto de Amores.

La expulsión del cancerbero y el tanto encajado descentró por completo a los cartageneros donde se cargaron de tarjetas y faltas. El Plásticos Romero acumuló la quinta cuando se llegaba al 32 y falataban aún 8 minutos por disputarse.

Entre tanto, los de Juan Carlos Guillamón ni tan siquiera se asomaban a las inmediaciones de Miñano y el partido se ponía muy cuesta arriba. Por ello, a falta de 8 minutos, el técnico plastiquero utilizó su tiempo muerto y comenzó a jugar con el portero jugador.

Pero la reacción no llegó en ningún momento y el tercer tanto del Barcelona entró a los 34 minutos.

La distancia en el marcador se siguió aumentando para el Barcelona tras un error de Patricio que aprovechó Oussama para conseguir el 4-1, y aunque el tanto de Rubén Zamora podía mantener a la escuadra cartagenera con opciones con el 4-2. Estas se diluyeron con el consumo de los pocos minutos que restaban y el definitivo gol de Miñano que cerraba el marcador en un claro 5-2.