El canterano Arturo Molina ha pasado a sentarse en la última fila de la clase que dirige como 'maestro' un José Manuel Aira que ha ido relegando tanto al futbolista a un segundo plano que ha dado como resultado que el mediapunta de Abarán se haya convertido en el jugador de campo con menos minutos disputados, en total 430 según los datos oficiales del club, además de tener en cuenta que solo ha sido titular en dos partidos en lo que llevamos de curso. Arturo decidió renovar el pasado verano después de tener sus tiras y aflojas con la entidad grana, pero el canterano nunca pensó que, de seguir así la situación, su temporada va a ser discreta con toda seguridad. Aún así, el talentoso atacante criado en la cantera grana ya lleva dos tantos esta campaña, uno en la primera vuelta ante el Villanovense y otro en Granada en el choque aplazado por el fallecimiento del presidente Jesús Samper y que supuso el triunfo grana ante el filial granadino. Su gol tan importante en tierras andaluzas dio la sensación de que iba a brindarle una segunda oportunidad por parte de su entrenador, pero nada más lejos de la realidad, ya que sigue viviendo una situación especial, ya que está comprobando que cada vez lo tiene más difícil para entrar en el equipo.

Y es que la situación que vive Arturo esta campaña es totalmente opuesta a la anterior. Tras el descenso administrativo en el verano de 2014, José Manuel Aira confeccionó una plantilla para competir en Segunda B en apenas quince días y tras asumir la marcha de los jugadores importantes que habrían continuado de haber seguido el equipo en la Segunda División. Sin, embargo, desde el conjunto juvenil Aira rescató a un joven que al principio siempre exhibía cosas distintas sobre el campo y que, por si fuera poco, anotó goles importantes en el curso anterior en casa del Racing de Ferrol, contra el Luanco, Langreo y Coruxo. También vio puerta en casa ante el Zamora, aunque también es verdad que terminó el campeonato sin gozar del protagonismo que seguramente esperaba el jugador. Hasta hace poco era el lateral zurdo Jordi Hostench el jugador menos utilizado por José Manuel Aira, pero la lesión de Fernando Pumar y el hecho de que el valenciano lleve ya cinco partidos seguidos como titular han sido suficientes para dejar a Arturo en una rampa de salida demasiado empinada.

El futbolista de Abarán es bien conocido por los aficionados porque lo han visto hacer de las suyas en Nueva Condomina, pero efectivamente el jugador ha cambiado en el sentido de que antes destacaba por su desparpajo y la facilidad innata que tenía para ver puerta y ahora, probablemente, interviene siempre mucho más encorsetado y en demarcaciones en las que será complicado que pueda enseñar sus mejores armas. Es entendible que el entrenador del Real Murcia haya preferido optar en momentos determinados por jugadores con un corte similar -como es el caso de Fran Moreno-, en lugar de Arturo porque por ejemplo el navarro mejoraba en muchas facetas las prestaciones del murciano. Ahora bien, lo que los aficionados no han terminado de entender tanto han sido las últimas decisiones de Aira en las que, en este caso, sí ha decidido darle oportunidades a un jugador como Javi López que cada partido se muestra más desafortunado, mientras que no ha tenido la misma paciencia con un jugador de la casa y que, de destacar en un momento determinado, también sería mucho más rentable a la hora de pensar en un hipotético traspaso.

El canterano grana, después de negociar con el club el pasado verano y ante el presunto interés de algunos clubes, firmó un contrato por cuatro campañas el 30 de julio del año pasado que ahora mismo seguro que le parecen demasiados teniendo en cuenta las pocas oportunidades de las que está disfrutando esta temporada. Su frustración, si la tiene, también va acompañada de cierta mala suerte en el sentido de que Aira ha apostado por una serie de jugadores que más o menos tienen el puesto garantizado, siempre que estén bien, y Arturo no está incluido en este grupo más selecto.

En su momento, José Manuel Aira fue sincero a la hora de explicar la salida de Arturo del equipo titular, teniendo en cuenta que el equipo llevaba tres semanas sin ganar en un mal arranque liguero: «No puedo hacer que la responsabilidad y la presión que existe ahora mismo pueda recaer sobre algunos de los más jóvenes». Y nadie puede discutir ni una palabra del discurso a un entrenador que desde entonces solo ha visto perder una vez a su equipo y que lo tiene instalado en el liderato con una ventaja muy importante de siete puntos sobre el segundo clasificado. Los resultados han sido excelentes, pero la cuestión es otra: ¿Se merece Arturo más oportunidades que otros compañeros? Cada aficionado tiene su opinión, pero la de Aira ha quedado clara, ya que su gente de arriba le está funcionando y Arturo, de seguir los buenos resultados, lo va a tener complicado para volver a sentirse importante en un equipo que mientras mantenga su racha triunfal será difícil que sufra cambios. Y este Murcia va lanzado a disputar un play off de ascenso que resulta vital para la garantizar la supervivencia de la entidad.