El español Miguel Ángel López, flamante campeón del mundo de 20 kilómetros marcha, aseguró que está "bastante emocionado" con su triunfo de esta mañana, que "es lo que buscaba" tras su progresión de los últimos años.

"Es impresionante lo que ha pasado. Era lo que buscaba, venía a ganar", afirmó exultante el marchador murciano, quien a sus 27 años se ha coronado a nivel mundial, en el primer título que consigue España en estos campeonatos desde 1999.

López, de 27 años y que se embolsará un premio de 60.000 dólares por su victoria, explicó que la carrera de hoy ha sido "muy dura", ya que los rivales estaban "muy fuertes", si bien algunos han fallado, como los japoneses, y especialmente Yusuke Suzuki, que estableció un nuevo récord del mundo en marzo pasado.

"Me he encontrado muy bien, iba en todo momento controlando, con sensaciones muy buenas", añadió el campeón español, quien en los últimos kilómetros mantuvo un emocionante duelo con el chino Zhen Wang, quien dio un tirón a falta de unos cinco kilómetros y logró algo de ventaja sobre el resto.

"Me iban avisando y me he lanzado a por él"

  • "Me iban avisando de que (Wang) llevaba dos avisos, me he lanzado a por él", explica, ya que confiaba en que su rival no se arriesgaría a una tercera amonestación que le habría supuesto la expulsión y quedarse sin medalla.
  • "He hecho unos parciales rapidísimos. Cuando le he cazado me ha pegado otro cambio. Me he quedado reservando para aguantar la ultima vuelta y darlo todo ahí", narra.
  • Tras su ataque, que resultó definitivo, "he visto que se quedaba y me he venido arriba y he podido disfrutarlo porque tenía un poco de fuerza al final". En el último kilómetro "me he dejado la vida" y "el momento de entrar (al estadio del Nido) ha sido impresionante", reconoce Miguel Ángel López, quien resume su táctica con un simple "aguantar, aguantar y llegar fuerte al final".
  • "Sabía que los últimos kilómetros iban a decidir la carrera. Había que llegar con fuerzas por el día que hacía, el calor. Creo que he sabido regular bien, llegar bien al final. Me he hidratado bien. Wang me lo ha puesto muy difícil", agrega.
  • El título mundial supone un nuevo peldaño en la progresión de López hacia la élite mundial, tras su quinto puesto en los Juegos Olímpicos de Londres (2012), la medalla de bronce en el mundial de Moscú de 2013 y el oro en los europeos de Zúrich del año pasado, en una agónica carrera que se decidió en el último esprint y cuyo recuerdo reconoce que le vino a la mente hoy en su duelo con Wang.

López atribuye parte de su éxito, además de a la intensa preparación, al factor psicológico que le ha dado más ambición: "Es muy importante la psicología, si no, no se gana este tipo de pruebas. Hay gente muy fuerte, pero hay que saber leer bien las carreras, cómo esta el día y aguantar hasta el final", explica.

El murciano rememoró que empezó en el atletismo con siete años y en la marcha con once, cuando un compañero de club enfermó y él, que no destacaba en otras pruebas, se ofreció voluntario para sustituirle.

Al final "se me dio bien" y pudo ver que tenía cualidades para esta modalidad, así que comenzó a adentrarse poco a poco. "Tuve la suerte de encontrar lo que se me da bien", recuerda.

En este punto, considera "fundamental" a su entrenador, José Antonio Carrillo, con quien está desde la categoría cadete, y del que reconoce que "todo lo que he conseguido ha sido gracias a él".

Estos mundiales están en parte bajo la sombra del escándalo de posible dopaje que ha sacudido al atletismo en las últimas semanas, y que ha hecho que la Federación Rusa no enviara a sus marchadores a la prueba de hoy.

López cree que los rusos "no eran los favoritos hoy aquí", pero sí dice que "me hubiese gustado que hubiesen estado todos" en la prueba de hoy.

Sobre la española de origen nigeriano Josephine Onyia, que no viajó a Pekín tras informarse de su cuarto caso de dopaje, el flamante campeón mundial reconoció que "lo de Onyia es ya de risa, no tiene nombre".

Para Miguel Ángel López, el dopaje es "en general, un problema de conciencia", y espera que "la gente se conciencie de competir limpia, saber dónde están las limitaciones de cada uno, eso es lo bonito del deporte. Si no, no tiene sentido. Saber dónde puedes llegar con tu entrenamiento y ya está".

Con la Cruz de Caravaca y el recuerdo de su novia

  • Sonriente tras su triunfo y con la bandera de España que le entregó el pertiguista navarro Adrian Vallés todavía anudada a la cintura, López habló a la prensa con tres pequeñas medallas colgadas del cuello: una de su nacimiento, otra con la muy murciana Cruz de Caravaca, que aún lleva incluso si se le rompió uno de sus brazos. La tercera medalla se la regaló su novia, Daniela, por su cumpleaños, y "la he besado en la cámara, porque se lo prometí". La medalla dice "Y llegaste tú", como el título mundial.