Terminado el período de prácticas en verano, con siete amistosos preparatorios que se han cerrado con tres victorias (Ciudad de Murcia, Real Murcia y Albacete, estos dos últimos en los penaltis), dos derrotas (Pinatar y La Hoya) y dos empates (Villarreal B y Atlético Baleares), el FC Cartagena prepara la última semana de entrenamientos antes de medirse el sábado (Estadio Cartagonova, 20.30 horas) al Linares Deportiva en el primer partido de liga. Así, el entrenador, Víctor Fernández, ha utilizado hasta 19 futbolistas de inicio -22 en total- en la puesta a punto del grupo, siendo Sergio Jiménez y Álvaro Montero, el único delantero de la plantilla, los únicos que han sido titulares en todos los encuentros de pretemporada; por contra, Titi Sanz, Txiki y Pepe Palau, el último en incorporarse a la entidad albinegra, no han sido de la partida en ninguno de los compromisos, un calendario que concluyó el sábado con la conquista del Trofeo Carabela de Plata.

Además de mantener las referencias de Sergio y Montero sobre el césped, el técnico emeritense también ha demostrado tener las ideas claras en la línea defensiva, donde los centrales Gonzalo Verdú y Moisés García únicamente empezaron desde el banquillo en una ocasión. Mientras que el cartagenero probó los asientos del Municipal de Mazarrón frente al CAP Ciudad de Murcia, el exjugador del Logroñés hizo lo propio contra La Hoya Lorca la semana pasada. Con Juan Carlos Ceballos y Jesús Álvaro en los laterales (ambos han salido de inicio cinco veces), la zaga albinegra parece inamovible para Víctor: ordenados y aseados, apenas si estos cuatro casos salen a tarjeta por partido. La veteranía de los centrales y el desparpajo de los laterales para incorporarse al ataque han sido claves, partícipes en el despliegue ofensivo del equipo.

Sin embargo, el caso opuesto son los teóricos zagueros suplentes: Candelas, con tres titularidades, Ayoze Placeres y Mario Sánchez, con dos, parece que tendrán que esperar una oportunidad en el banquillo, ya como segundo plato. De postre, dos escalones por debajo, está el veterano de 36 años Txiki, aún pendiente de confirmar si formará parte de la plantilla. Víctor ya ha dicho en varias ocasiones que el suyo es un caso especial, pero igualmente se ha mostrado satisfecho con el trabajo del barcelonés, autor del penalti que dio el triunfo en la Carabela de Plata a los albinegros.

Ya en el círculo central, el doble pivote formado por Sergio Jiménez y Luque ha sostenido el juego en varios momentos de la pretemporada: en el partido contra el Real Murcia, de hecho, la pareja albinegra conquistó en el centro del campo en detrimento del grana Chavero. El pasado sábado, sin embargo, el doble pivote se vio superado por Jara, el centrocampista del Albacete, en varios compases de la Carabela de Plata. Con la baja de Ramón Arcas y la continuidad de Luque (aceptó rebajarse el sueldo para continuar), el joven Palau, de 23 años, ha estado en el banquillo como alternativa a dar un respiro, bien a Sergio o a Luque. El exjugador del Villarreal B, no obstante, ha sido el último en llegar al club, por lo que aún está en proceso de adaptación a la plantilla.

Pese a que las cifras de goleadoras son menores a las de la pretemporada pasada, la afición parece estar más satisfecha con las sensaciones que ha dejado el grupo de Víctor Fernández: las victorias ante Real Murcia y Albacete, a priori los dos encuentres de mayor exigencia, dieron un empujón a la campaña de abonados, que ya supera con creces a los números de hace una temporada, con casi 4.700 carnés.

El regreso de Juan Carlos Menudo, el descubrimiento del joven Álex Jiménez en la banda y la entrega de Álvaro Montero, con cinco, cuatro y siete partidos, respectivamente, ha elevado la autoestima de un equipo noqueado anímicamente el curso anterior. Arriba, además, Titi Sanz, uno de los tres jugadores que no ha salido de inicio, espera poder entrar en los planes de Víctor Fernández, bien como integrante de la primera plantilla o en el filial, el CD Algar.

En cualquier caso, el preparador espera la llegada esta semana de al menos dos futbolistas que refuercen el ataque cartagenerista.