Con el Oviedo escapado, el Real Murcia no puede quitar el ojo del espejo retrovisor, donde aparecen reflejados el Racing de Ferrol, con cuatro puntos menos que los granas, y el Logroñés, con cinco. Bien es cierto de José Manuel Aira y algunos jugadores ya han avisado que lo importante es entrar en el play off, independientemente de ser segudo, tercero y cuarto, pero los murcianistas, después de tres jornadas sin ganar, necesitan recuperar las sensaciones para evitar que los fantasmas y las dudas comiencen a aparecer en Nueva Condomina en un momento transcendental de la temporada.
La primera oportunidad para ir sellando la presencia en la fase de ascenso llegará esta mañana (12.00 horas) en las instalaciones de Mareo, donde los de Aira se verán las caras con un filial en racha después de sumar cuatro triunfos consecutivos, aunque también es cierto que el conjunto rojiblanco afrontará el encuentro con las bajas importantes de Mendi, con una rotura de fibras; Benito, sancionado; y Jorge Meré, citado con la primera plantilla. Esta última ausencia es la que más agradecerá el Real Murcia, tal y como dejaba entrever el propio técnico murcianista en su rueda de prensa.
Pero no será el Sporting el único con ausencias, porque los murcianistas también pierden a un hombre hasta ahora imprescindible, el central David Prieto, cuyo puesto será ocupado por el lateral Víctor Ruiz, quien también puede ser importante tanto en las jugadas de estrategia como a la hora de aportar profundidad en ataque.
Además, Aira estará obligado a introducir otra novedad después de que Isi se cayese de la lista de convocados por unas molestias musculares de última hora. Lo normal es que Rubén Sánchez vuelva a la banda derecha después de cuatro partidos, aunque teniendo en cuenta que el técnico grana no está contento con el rendimiento del albaceteño no se pueden descartar otras opciones, como cambiar de lado a Jairo, llevar a Javi Flores a la izquierda y colocar a Arturo en la media punta.
Salga quien salga en el once, el Real Murcia está obligado a ganar para romper una racha de tres partidos consecutivos sin conseguir el triunfo para, además, recuperar la imagen que le ha llevado a ser el conjunto más sólido a domicilio y que incomprensiblemente se diluyó en la salida a Somozas, donde los murcianistas caían derrotados pese a adelantarse en el marcador con un gol de Javi Flores nada más comenzar el choque.
El empate del sábado frente al Oviedo, aunque dejaba a los murcianos sin prácticamente opciones de luchar por el liderato del Grupo I, ha reforzado la moral de la plantilla. O eso es lo que afirmó tanto Aira nada más terminar el partido como Javi Flores a mediados de esta semana.
Esa mejoría que ha llegado hasta lo mental es la que intentarán demostrar los granas ante un Sporting B que para completar su convocatoria ha tenido que llamar a tres juveniles.
