La Fiscalía ha pedido una multa de 900 euros para el jugador del FC Barcelona Gerard Piqué por su presunta falta de respeto a dos agentes de la Guardia Urbana cuando amonestaban al hermano del futbolista junto al paseo Marítim de la capital catalana el 13 de octubre de 2014 por una infracción de tráfico.

En sus conclusiones tras el juicio celebrado este jueves en la Ciudad de la Justicia al que no ha acudido el jugador ---no tenía obligación al ser una vista oral por una presunta falta--, la fiscal ha cifrado la sanción en esta cantidad al ser "notoria su capacidad económica".

El policía que denunció a Piqué por su comportamiento ha asegurado en su declaración como testigo que el futbolista, entre otras cosas, le dijo visiblemente alterado: 'Esta multa la va a pagar tu padre', además de decir que le daba asco la Guardia Urbana, que los agentes eran unos muertos de hambre y multaban para cobrar comisión.