Nadie en el Real Mucia se da por vencido. Menos Jesús Samper, que como ha afirmado en muchas ocasiones, a cabezón no le gana nadie. Ayer, pese a no tener el certificado de la Agencia Tributaria que le exige la Liga ni, según Javier Tebas, cumplir los ratios económicos (equilibrio entre ingresos y gastos a corto plazo), el presidente murcianista inscribió al club grana en Segunda División. Ahora, el organismo liguero tendrá cinco días para estudiar la documentación de todos los equipos y decidir quién participará y quién no en la próxima temporada. Aunque, el propio presidente de la LFP ya afirmaba el miércoles que los dos únicos conjuntos que tienen muy complicados permanecer en la categoría son el Real Murcia y el Racing de Santander. De todas maneras, los máximos responsables de la entidad grana se muestran optimistas y creen que al final se salvará la situación.

Y es que ahora el problema con Hacienda parece quedar en un segundo plano para la Liga. De hecho, clubes como el Recreativo de Huelva, el Zaragoza, el Sporting, el Getafe y el el Espanyol, al margen del Racing y del Murcia, no lo han conseguido ni lo conseguirán. Así lo explicaba Santiago Menéndez, director general de la Agencia Tributaria, en declaraciones al diario As: «No se va a emitir un certificado de estar al corriente a un contribuyente que no esté al corriente».

La intransigencia de la Administración ha trastocado las normas de control económico impulsadas por Javier Tebas para sanear el fútbol español. Y es que de cumplirlas a rajatabla serían hasta siete los clubes que tendrían que ser expulsados tanto en Primera como en Segunda.

Por ello, después de la Asamblea de la LFP, el presidente del organismo del fútbol profesional indicaba que ahora lo importante eran los ratios económicos (que los gastos se ajusten a los ingresos a corto plazo). «El problema del Racing y del Murcia no es un problema exclusivo de la deuda con la Agencia Tributaria», comentó Tebas. «La LFP aprobó el año pasado unos ratios económicos para poder competir que dependen de la deuda respecto al volumen de ingresos», señaló.

Este cambio de discurso ha favorecidos a todos los clubes implicados excepto al Real Murcia y al Racing de Santander, que según Tebas a día de hoy estarían fuera de la competición, un descenso que, de no levantar la mano la LFP, se podría confirmar el próximo 7 de agosto, día en el que se reúne la comisión delegada.

Sin embargo, sin importarle los tejemanejes de Javier Tebas, Jesús Samper inscribió al Real Murcia ayer en Segunda División. Y para reforzar la documentación aportada, el presidente del Real Murcia incluyó el recurso que esa misma mañana había presentado en el Tribunal Económico Administrativo, dependiente del Ministerio de Hacienda, y en el que solicita que se revise la decisión de la Agencia Tributaria de no concederle a la entidad grana un aplazamiento a cinco años por la deuda de catorce millones, de los cuales ya han sido desembolsados a lo largo de esta campaña unos cinco. El último pago se realizaba hace solo unos días después de confirmarse el traspaso de Kike García al Middelsbrough por 1,5 millones de euros, cantidad que inmediatamente después fue ingresada a cuenta de deuda a Hacienda.

Según fuentes del Real Murcia, presentando este recurso, la Liga de Fútbol Profesional ya no puede tomar ninguna decisión sobre la presencia del club grana en Segunda División. De todas maneras, la LFP tendrá ahora cinco días laborales para estudiar toda la documentación y decidir si el Real Murcia estará finalmente en la próxima Liga Adelante. Por lo tanto, tanto Jesús Samper como la afición murcianista tendrá que esperar hasta el jueves de la semana que viene para ver si Tebas cumple con su amenaza.