El Reale Cartagena ofreció una de sus mejores versiones de la temporada en el encuentro que disputó anoche, pero cayó derrotado ante un Inter Movistar más acertado y mucho más efectivo. Los de Fonseca dieron un rendimiento mayor con las nuevas incorporaciones y probablemente ante otro rival de menor nivel, se podrían haber llevado el triunfo, pero este Inter cuenta entre otros con Luis Amado, uno de los mejores porteros del mundo y ayer más que decisivo en el triunfo de su equipo.
El primer tiempo dio para mucho. Además de empezar tarde, el partido se interrumpió al tener que atender con urgencia al visitante Schumacher, quien sufrió un fuerte golpe en la cabeza, motivo por el que perdió el conocimiento durante unos minutos y tuvo que ser inmovilizado y rápidamente trasladado al hospital. Además, la primera parte generó cierta polémica con la expulsión de Yoni por recriminarle de forma ostensible una decisión del colegiado.
En lo puramente deportivo, el Inter mostró su enorme pegada tanto al principio como al final de la primera parte. El equipo cartagenero puso voluntad y las ocasiones más claras, pero los pupilos de David Marín fueron mucho más contundentes. Gabriel adelantó a su equipo con dos goles en los cuatro primeros minutos y Carlos Ortiz y Eka pusieron más tierra de por medio a un minuto del final. Entre tanto, Cobeta y Bebe acortaron distancias con sus goles y evitaron que el encuentro quedara sentenciado.
En el segundo periodo, el juego fue un monólogo constante del equipo local en su intento por acortar distancias. El Inter parecía tocado por el incidente de su jugador y trataba de salvar la situación como fuera respaldándose sobre todo en la gran actuación de su portero.
A falta de cuatro minutos para el final, y ya con portero-jugador, Betao ponía el 3-4 en el marcador y llevaba la emoción a la grada. Los últimos instantes fueron de acoso a la portería visitante con un disparo al poste de Messias, pero el marcador ya no se movió para disgusto de los locales.
