Kike Boned y ElPozo se juraron ayer amor eterno, demostrando que en el mundo del deporte la fidelidad también existe. La relación de la entidad murciana con el jugador valenciano comenzó hace nueve años y según el acuerdo de renovación sellado ayer por ambas partes se extenderá hasta junio de 2013, lo que permitirá al futbolista retirarse de rojo. Kike, que acababa contrato en 2011, firma por dos campañas más.

"Las negociaciones prácticamente ni han existido, porque considero que tanto el club como yo estábamos condenados a entendernos. Ellos contaban conmigo y yo les debía fidelidad después de todos estos años", señalaba Kike Boned a esta redacción.

El cierre valenciano definió su relación con ElPozo como "un matrimonio bien avenido" y restó importancia a la rebaja de sueldo que traerá consigo su nuevo contrato: "Ambas partes hemos cedido, nos hemos amoldado a la nueva situación. Como deportista me siento un privilegiado, estoy respaldado por el club, por la afición, por la sociedad, por lo que el dinero en este caso no era lo más importante", añadía.

Después de nueve temporadas en ElPozo y de nueve títulos a nivel nacional y dos en Europa (Recopa y Copa Ibérica), Kike Boned no se cansa de ganar, por ello sus objetivos en estos últimos años de su carrera serán "seguir ganando títulos y dejar un legado, para que cuando me vaya pueda aportar cosas a la gente que venga detrás".

Pero si hay un título más deseado que otro para el mejor jugador del mundo esa es la Copa de Europa. Por ello Kike Boned y sus compañeros volverán a poner sus ojos en el máximo título europeo: "No vamos a renunciar a nada, pero la Copa de Europa estará marcada en rojo en el calendario", dijo.