La Final de la NBA entre Los Ángeles Lakers y Boston Celtics arranca esta madrugada (tarde en California), a las 03:00 desde el Staples Center, el escenario desde donde, horas atrás, ambas plantillas se dirigieron los últimos mensajes antes de que el balón se eche al aire.

Saltan chispas entre ambos equipos. Ningún jugador puede esconder el sentimiento que ambas franquicias se profesan. Y ello quedó claro, una vez más, durante el encuentro con la prensa organizado por la NBA este miércoles en el pabellón de los angelinos.

Alrededor de un centenar de periodistas pudo seguir de cerca los últimos 30 minutos del entrenamiento de los Lakers, y los primeros 30 del de los Celtics. También hubo posibilidad de departir con los protagonistas sobre el parqué del Staples, y allí se pudieron escuchar algunas pullas nada veladas.

La más directa, la de Paul Pierce, el máximo anotador de los Celtics, curiosamente un californiano que creció en el barrio de Inglewood, a escasos kilómetros del pabellón donde se juega la gran Final.

"Creo que nuestros aficionados tienen algo más de conocimiento del juego. Las celebridades de aquí vienen para salir de sus casas y ver a otros famosos", manifestó el líder céltico. Esa frase retumbaba pocos minutos después en las emisoras deportivas de Los Ángeles, provocando el enfado de la afición californiana.

Poco antes Phil Jackson daba su opinión al respecto de una abrumadora estadística: tiene un registro de 47 victorias y ninguna derrota en series de "playoffs" en las que su equipo comienza ganando el primer partido.

"Bueno, obviamente quiere decir que el primer partido es realmente importante", dijo entre risas el ganador de seis anillos como técnico de los Chicago Bulls, quien explicó que siente cierta "intriga" por cómo se desarrollará el emparejamiento entre Kevin Garnett y Pau Gasol.

"Kevin es su gran baza en defensa, la pieza que les mantiene unidos con su constante actividad y su habilidad para ayudar a sus compañeros. Pau debe ser parte del combo anotador junto a Kobe Bryant. Y debe darnos eso ante uno de los mejores defensores de la Liga", manifestó.

El ala-pívot español de los Lakers, tras soportar las bromas del reportero Guillermo, del show de Jimmy Kimmel -quien le invitaba a ir a ver "Sex and the City 2" (Sexo en Nueva York 2) tras el partido de esta noche-, subrayó que su equipo está preparado para el reto de revalidar el título de campeón.

"Se trata de ganar el anillo, sea como sea y contra quien sea. Ese es el mérito y al final, lo que queda", apuntó el catalán. "Conocemos al rival, y debemos mover el balón, atacar bien y ser duros en defensa. Lo básico, que al final es importante", añadió.

A todo esto, Bryant no se vistió de corto y presenció parte del entrenamiento de sus compañeros desde la mesa de anotadores, cerca de Andrew Bynum, quien aunque sí participó, pasó los últimos minutos sentado con un aparatoso vendaje en la rodilla derecha, debido al desgarro parcial que sufre en el menisco.

Lakers y Celtics se han enfrentado previamente once veces en la Final de la NBA, de las cuales nueve fueron a parar a manos del conjunto de Massachusetts.

Ambas franquicias se reparten 32 anillos de campeón, con 17 para Boston. La última vez que los dos equipos se cruzaron en la Final de la NBA fue en 2008, meses después del desembarco de Gasol en las filas angelinas.

"Una vez que comiencen estos partidos, entonces se escribirá su propia historia, y en eso es en lo que nos tenemos que centrar", apuntó Doc Rivers, técnico de los Celtics.