Ya se está convirtiendo en un rito para muchos aficionados del Cartagena y funciona a la perfección. Cada partido televisado del conjunto albinegro fuera de casa, supone que los bares de la ciudad se llenen de seguidores para, mientras saborean de una buen aperitivo, disfrutar también del juego y los triunfos de su equipo. Así se pudo ver en algunos locales como el 'Warm-up' el 'Carrots Café' y 'El Cortijo', por citar algunos de ellos.

La euforia que vivieron en Nueva Condomina los casi ocho mil aficionados cartageneristas también se trasladó a 50 kilómetros del estadio grana. Los seguidores viven en una nube desde el pasado mes de mayo y no parece que nadie les pueda bajar de ahí.

Las calles de la ciudad estaban desiertas a las doce del mediodía porque se vivía el derbi por antonomasia. La madre de todos los derbis de la Región, por lo que tanto a los que les gusta como a los que no el fútbol estaban obligados a seguirlo por la pequeña pantalla.

Seguro que será recordada por mucho tiempo la goleada y todos -los cartageneros, claro- tan contentos. Grandes y mayores lo pasaron en grande, porque no podían esperar más. Ganar al Murcia en su campo y con goleada. ¿Alguien da más?