Quedan pocos días para conocer el desenlace del futuro del Lorca Deportiva, pero a medida que avanzan las fechas se asume dentro del seno del club lorquinista tanto el plan A como B del actual presidente, Manuel Muñoz Carrillo. Parece claro que el equipo lorquino no va a poder hacer frente a la deuda con los jugadores, los cuales han denunciado a través de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) una deuda total de 363.000 euros, por lo que, si no la resuelve, será descendido a Tercera división y competirá en el Grupo XIII, ya que no va a desaparecer.
El equipo al que corresponde ascender a Segunda B por derecho, en el caso de que baje el Lorca, es el Moratalla, al que han tanteado unos empresarios lorquinos para que cambie su domicilio social a Lorca y así la Ciudad del Sol pueda seguir teniendo un equipo en la categoría de bronce que se llamaría Lorca-Moratalla, un club que partiría de cero, sin deudas y con aspiraciones a todo.
El técnico sería Beto Bianchi y el coordinador deportivo, Joaquín Vigueras. Los jugadores que hasta ahora han sonado para el Lorca, que se han comprometido con Vigueras, jugarían en el nuevo club y de blanquiazul. Éstos todavía no han podido firmar los respectivos contratos, hasta que los trámites burocráticos queden solventados.
La otra pata de la mesa se llama Club Deportivo Lumbreras. El equipo lumbrerense también está inmerso en el trueque, ya que cedería su plaza en Tercera División al actual Moratalla y así todos contentos.
El actual Lorca Deportiva no puede desaparecer por el momento, ya que de hacerlo no sería el Moratalla el que ocuparía esa plaza, si no un conjunto de Andalucía.
No es lo mismo desparecer que descender, por lo que Manuel Muñoz Carrillo seguirá provisionalmente como presidente del club descendido, aunque tendrá también alguna responsabilidad, en la sombra, sobre el futuro Lorca-Moratalla.
El próximo lunes 3 de agosto se podría hacer público todo este entramado una vez que haya finalizado el plazo para pagar la deuda en la AFE.
Desde el Lorca ni se desmiente ni se confirma esta posibilidad, pero ya se ha dejado de negociar con los jugadores de la pasada campaña, aunque alguno de estos está circulando por Lorca intentando cobrar algo de lo que se le adeuda.
Muñoz Carrillo indicó a este diario que seguirá negociando hasta el último momento con los futbolistas para evitar el descenso por impago. Sin embargo, todo está a falta de que la Federación Española autorice todos estos trasiegos. Existen varios precedentes en los últimos meses, como la fusión del Logroñés y el Varea.
