Un bonito gol por la escuadra de David Villa, que salió en el segundo tiempo, dio la victoria a España en el amistoso que disputó ayer contra Italia, un duro rival, que destacó especialmente en el juego aéreo. Los de Luis Aragonés fueron mejores en el primer tiempo, donde se pudieron ver algunos detalles de Cesc e Iniesta, y bajaron en intensidad en la segunda parte, hasta que Villa abrió el marcador.
La selección española afrontaba ayer ante Italia, con un estadio Martínez Valero de Elche a rebosar, el último partido serio de preparación antes de la disputa de la Eurocopa. Para ello, Luis Aragonés alineó a un once muy parecido al que utilizará en la cita europea, en el que Fernando Torres actuó como único delantero.
Desde el primer minuto, los españoles dominaron la pelota ante un conjunto italiano que, como es habitual, se mostró muy bien posicionado en defensa e intentó una y otra vez robar en el centro del campo para salir al contragolpe, donde Di Natale y Toni respondieron con mucho peligro, especialmente en los balones aéreos.
En el minuto 12, los de Donadoni batieron a Casillas con un buen remate de cabeza de Toni, pero el tanto fue anulado. En ese instante, los españoles reaccionaron con una bonita contra. Torres avanzó hacia delante de forma rápida, le puso el balón a Silva, quien lanzó sin pensarlo, aunque el balón se perdió junto al palo.
Fue el primer aviso de un combinado español que mantuvo el control del balón, pero no fue capaz de superar con claridad a la sobria defensa italiana. La mejor ocasión de los de Aragonés llegó en el minuto 36, cuando Silva, tras una gran combinación, dejó de cabeza a Fernando Torres, cuyo disparo fue despejado por Buffon. El balón le quedó a Cesc, pero Buffon volvió a responder.
En la reanudación, la primera opción de peligro llegó del lado italiano, cuando Camoranesi, a centro de Grosso, estrelló el balón en el larguero (50').
La selección española bajó en intensidad en la segunda parte, lo que llegó a desesperar a la grada. Los pocos detalles ofrecidos en la primera parte desaparecieron en los segundos cuarenta y cinco minutos, donde España también perdió el control de balón.
En el 66, un fallo de Cannavaro significó la primera ocasión de los de Aragonés, pero Cesc se volvió a encontrar con Buffon.
En el 76, Casillas salvó a España del 0-1 tras despejar a bocajarro un disparo de Camoranesi.
A continuación llegó el tanto de España. Villa, aprovechando un despeje de Cannavaro, colocó, desde el borde el área, un gran disparo que se coló por la escuadra de la portería de Buffon.
