Ni siquiera el 0-1, que complicó más la situación, frenó la obligada reacción del Atlético, que afrontaba el choque tras sumar sólo cuatro de los últimos dieciocho puntos, que sólo había ganado cuatro de los quince partidos oficiales anteriores y que había vivido un 2008 alarmante, con eliminaciones en Copa del Rey y UEFA.

Y ahí regresó la magia del joven ariete, al que los rojiblancos habían echado de menos en los dos duelos precedentes, en los que fue baja por sanción frente al Bolton inglés y Osasuna, para rehabilitar a su conjunto con dos goles (el 1-1 y el 4-1), una asistencia a Maxi Rodríguez en el 2-1 y ser objeto del penalti que significó el 3-1.

Sin duda, Agüero, que además había sido duda por lesión para el partido, fue el indiscutible protagonista del encuentro. Su genialidad en el regate, su visión de juego, su habilidad y su velocidad acabaron con la defensa del Barcelona. "Al 'Kun' le das un balón cuadrado y te hace un buen traje", valoró el colombiano Luis Amaranto Perea, su compañero en el Atlético, tras el triunfo.

El delantero argentino es el máximo goleador rojiblanco esta temporada de Liga, en la que ha firmado once goles, cinco más que en todo el curso pasado y con el Barcelona como 'víctima' favorita desde este sábado, junto al Athletic de Bilbao. Le ha marcado ya tres goles a cada uno desde su llegada al club, en 2006-07.

El uruguayo Diego Forlán suma los mismos tantos que Agüero en Liga esta campaña, once, por encima del argentino Maxi Rodríguez, con seis. Ambos marcaron este sábado frente al Barcelona. Por detrás, el portugués Simao Sabrosa y Raúl García han logrado tres dianas, mientras que José Manuel Jurado y Luis García llevan dos.

El Atlético, al mismo tiempo, recuperó su pegada ofensiva, olvidada en los últimos tiempos y que asombró durante la primera vuelta del campeonato. El equipo rojiblanco, que ha firmado cuatro goles en otras tantas ocasiones esta temporada, no repetía un marcador tan amplio desde el pasado 25 de noviembre de 2007, cuando se impuso por 4-3 al Valladolid en el estadio Vicente Calderón.

Esa, precisamente, había sido su última y única remontada en esta Liga. La repitió contra el Barcelona, con el que conquistó su primera victoria de la temporada ante rivales de la zona alta. Antes había perdido con el Real Madrid (2-1 y 0-2), el Espanyol (1-2), el Villarreal (3-4) y el equipo azulgrana en el Camp Nou (3-0).

Además, el resultado de este sábado contra el equipo azulgrana elevó de nuevo las cifras anotadores del equipo, que cerró la vigésimo sexta jornada con sus mejores números de goles a favor de la última década, superado por 1997-98, cuando había marcado diez más, 54, a estas alturas de la temporada.

También fue el final de la crisis de las últimas semanas, el regreso a la tranquilidad para el futuro inmediato del mexicano Javier Aguirre en el banquillo rojiblanco, donde afrontaba su situación más comprometida desde su llegada al Atlético, y la recuperación de la autoestima para la plantilla.

"El equipo necesitaba, más allá de los tres puntos, reconciliarse con su afición y con ellos mismos con fútbol y con goles", reconoció el técnico tras el partido, donde también valoró: "Los entrenadores tenemos derechos y obligaciones. Y una de nuestras obligaciones es cumplir objetivos y agradar. Y si no lo hacemos es lógico que se especule con la continuidad de los técnicos. Convivimos con ello".

El Atlético, con su mejor registro de puntos y victorias de la última década, afrontará las últimas doce jornadas de la temporada en la cuarta posición, en puestos de Liga de Campeones, donde ha permanecido ocho de las últimas nueve semanas. En total, ha estado en esas plazas en doce de los 26 capítulos de esta campaña.