Mejía, que fue expulsado por cometer penalti sobre Laurent Courtois en el tramo final del encuentro cuando el resultado todavía era de 1-1, no se tomó nada bien la decisión del árbitro madrileño y por ello, según lo reflejado en el acta del encuentro, le insultó.

A la sanción que el Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol le imponga al futbolista por su expulsión, en principio un partido, seguramente le acompañará otra por sus comentarios despectivos en contra del árbitro.

La actuación del colegiado se protestó por parte del Murcia, al entender los granas que el penalti señalado no lo fue y que el tercer gol del Levante lo logró Pedro León en posición de fuera de juego, y también por el conjunto valenciano, por considerar que el 2-2 no debió subir al marcador por falta al portero visitante, Vladan Kujovic.

Las decisiones en contra de los locales llevaron la indignación a la grada, donde también se criticó el conservadurismo del equipo cuando vencía por 1-0, y precisamente tras la señalización del penalti fueron lanzadas varias botellas de plástico con agua, sin que ninguna llegase a alcanzar a Rubinos Pérez.

Esta incidencia, además de conllevar una multa económica, podría traer consigo mayores consecuencias, pues el estadio Nueva Condomina ya está apercibido de cierre.

El partido perdido ayer frente al Levante, colista de Primera División, ha hecho cundir el pesimismo y el mal ambiente en torno al Murcia, equipo que ha encadenado una racha de tres derrotas consecutivas y que roza los puestos de descenso, en los que se encontraba hasta que el Recreativo de Huelva encajó también ayer su tercer gol ante el Getafe (1-3).

Esta mañana la plantilla ha vuelto a los entrenamientos con caras largas y tras la práctica el uruguayo Pablo García ha comparecido en rueda de prensa para comunicar que ya no volverá a hacer declaraciones públicas hasta el final de la temporada.

"Hay que centrarse en trabajar y en salvarse, en estar tranquilo y ya habrá tiempo para hablar", dijo el charrúa para anunciar su veto a la prensa.