La primera vuelta del campeonato de Liga en Primera llega hoy a su conclusión para un Real Murcia que, aún no puntuando esta noche en el Nou Camp, se mantendría fuera de los puestos de descenso a Segunda. Si bien es cierto que el rival, el FC Barcelona, no es el más idóneo para cerrar la primera fase del torneo con una victoria, lo cierto es que los hombres de Lucas Alcaraz han mostrado durante toda la semana un optimismo poco usual teniendo en cuenta el nivel del rival con el que hoy se van a ver las caras.

El cuadro murcianista, que a lo largo de su centenaria historia nunca ha ganado en el feudo culé, se desplazó ayer hasta la Ciudad Condal con 19 futbolistas, ya que Lucas Alcaraz estimó oportuno llevarse al brasileño Rosinei por si su transfer llegaba a tiempo y poder utilizarlo esta noche. Sin embargo, y un día más, la Confederación Brasileña de Fútbol sigue dando largas al envío de la documentación del centrocampista.

Los granas afrontan el envite con las ausencias por lesión de Paco Gallardo y de Mario Regueiro, mientras que por decisión técnica se quedaron en Murcia el capitán Ibán Cuadrado, Alejandro Marañón y Bruno Herrero. Fiel a su estilo, el técnico del Murcia hará mínimos cambios en el once inicial y sólo las incursiones de Ochoa y de De Lucas en el once titular serán las novedades con respecto al equipo que la pasada semana derrotaba al Osasuna en Nueva Condomina.

Un Barça casi de suplentes

El FC Barcelona, por su parte, sin Ronaldinho ni Deco y con problemas en la posición de mediocentro, se pondrá a prueba con la imperiosa necesidad de sumar una victoria para no perder aún más la estela del líder.

Además, Rijkaard tiene previsto dar descanso a alguno de sus jugadores titulares, que los piensa reservar para la vuelta de la Copa ante el Sevilla tras el 1-1 del Ramón Sánchez Pizjuán.

Después de que se haya quejado tras el encuentro ante los hispalenses del rendimiento de tres jugadores, el holandés realizará variaciones en defensa y en la media.

La baja de Edmilson, lesionado en Sevilla, y la de Touré Yayá, que se encuentra convocado por Costa de Marfil para disputar la Copa de África, suponen un quebradero de cabeza para Rijkaard, quien sólo dispone de Márquez para ocupar esta posición.

El pase de Márquez a esa posición supondrá un movimiento correlativo de fichas. Carles Puyol, asiduo del lateral derecho en los últimos partidos, podría descansar; Thuram sería el acompañante de Milito en el eje, mientras que el italiano Gianluca Zambrotta es el único lateral derecho que le queda en nómina a Rijkaard.

Todo apunta a que Xavi o Iniesta descansarán. Ninguno de los dos pasa por su mejor momento y además Rijkaard ya ha anunciado que reservará efectivos. Por ese motivo, el islandés Gudjohnsen podría tener su oportunidad.

En la delantera, Rijkaard no realizará variaciones con respecto de la presentada ante el Sevilla. Eto'o, Henry y Giovani jugarán de inicio.