La lesión de Gabriel Heinze ante el Real Zaragoza, rotura del músculo bíceps femoral de su pierna izquierda, le mantendrá de baja mes y medio. Unido a los problemas de la fascitis plantar de Christoph Metzelder y el esguince de tobillo de Fabio Cannavaro, hacen que el estado de Ramos sea clave para el partido en Mallorca.

Es seguro que Pepe regresará tras superar un pequeño problema muscular y la fuerte gripe que le debilitó en el inicio de año y provocó que Bernd Schuster le reservara el pasado domingo.

Ramos no saltó al césped en la mañana de hoy por precaución.

Según confirmó el propio jugador al abandonar Valdebebas, sufre un golpe y se ejercitó en el gimnasio. Mañana se probará junto a sus compañeros y en principio no habrá problema para que sea titular el jueves en el Ono Estadi. Luego, descansará en Liga, ante el Levante, por sanción.

Con la línea defensiva entre algodones, el Real Madrid volvió al trabajo tras disfrutar de un día de descanso. Heinze comenzó el proceso de recuperación de la nueva lesión que sufre, la tercera desde que llegó al Real Madrid a finales de verano.

Mientras, Cannavaro trabajó en la piscina y recibió masaje para tratar el esguince de su tobillo izquierdo que le descarta para Mallorca pero no para el encuentro del próximo domingo en Valencia ante el Levante.

Por su parte, Julio Baptista no acudió a la ciudad deportiva por una faringoamigdalitis aguda. Los médicos le han puesto un tratamiento y reposo. Su participación en Copa del Rey está prácticamente descartada.

Si se entrenó con el grupo Diarra, en su último día a las órdenes de Schuster antes de marcharse a jugar la Copa de África. EL mali se despidió de sus compañeros que le desearon suerte en la competición que le puede ausentar durante un mes y una semana en caso de que su selección dispute la final.

Mañana, desde las 11.30 horas y a puerta cerrada, Schuster decidirá el equipo que jugará en Mallorca. Volverá Jerzey Dudek a la portería, Pepe a la defensa y la duda es Míchel Salgado o Miguel Torres. En ataque Roberto Soldado y Javier Saviola luchan por un puesto, más cerca de caer del lado del argentino, por la posible salida del club del primero.