El 75 por ciento de estas entradas se venderán en China, mientras que el resto se distribuirán en el extranjero a través de los diferentes comités olímpicos.

Como ya anunció el BOCOG a finales del año pasado, los precios de las localidades serán accesibles para la inmensa mayoría de los ciudadanos.

Wang Wei, vicepresidente ejecutivo y secretario general del BOCOG, anticipando la gran demanda de localidades, señaló que el proceso de venta se hará de la manera más abierta, justa y eficiente posible.

Las entradas para las pruebas cuya demanda supere a la oferta se repartirán por sorteo.