El Real Murcia salió derrotado de su visita a la UD Las Palmas y rompe su racha de imbatibilidad lejos de La Condomina, en un choque en el que el conjunto de Lucas Alcaraz realizó unos primeros 45 minutos realmente flojos, y en la segunda parte, con la entrada de Adrián Martín y Gallardo, mejoró su juego, pero apenas tuvo ocasiones claras para, ni siquiera, igualar la contienda.
El comienzo del choque fue de color amarillo. La Unión Deportiva Las Palmas se pudo adelantar en el marcador a los nueve minutos de partido en un pase de Arriagas sobre Trashorras, pero el disparo del media punta amarillo lo detuvo con apuros Notario. El cuadro de Lucas Alcaraz, bastante ordenado en el terreno de juego pero con poca profundidad, solamente lo intentaba en balones largos sobre sus delanteros Antoñito e Iván Alonso, pero la zaga amarilla se mostraba contundente y no dejaba que llegaran los balones a su guardameta González.
El jugador amarillo Villuela, tras recibir un pase de Darino se fue en velocidad de Pignol, llegó a línea de fondo y su centro lo cabeceó el pichichi de la categoría, Marcos Márquez, pero el balón salió rozando el poste de la meta pimentonera.
A partir del cuarto de hora de partido, los visitantes dieron señales de vida, al gozar (14') de su primera ocasión de gol en un pase de cabeza de Bruno sobre Antoñito, y el atacante andaluz, con un disparo desde la frontal, estuvo a punto de adelantar al equipo murcianista, aunque su disparo salió por encima de la portería.
El cuadro de Juanito circulaba el balón con más claridad que su rival, y además presionaba a los organizadores del juego, Richi y Bruno, de ahí que el dominio, aunque de forma ligera, seguía siendo del cuadro canario.
La UD Las Palmas hacía daño al Murcia en las jugadas de estrategia y a los veinticinco minutos los amarillos se pudieron adelantar en el marcador en una falta lanzada por Trashorras, en la que Cobas peinó el balón y Notario, con muchos apuros, desvió a saque de esquina.
La escuadra canaria se adelantaría en el marcador a los treinta y cinco minutos, tras aprovechar un saque de esquina botado por Trashorras. En el típico barullo dentro del área, Pignol derriba a Darino cuando se disponía a rematar y el colegiado señaló penalti. La pena máxima la lanzaría Marcos Márquez con fuerza y por el centro de la portería, adelantando a la UD Las Palmas en el marcador.
A partir de ese instante y hasta el final de la primera parte, Las Palmas se dedicaría a defender el resultado y el Murcia gozaría de más posesión de balón aunque no crearía ninguna ocasión de gol, por lo que se llegó al descanso con la mínima ventaja amarilla.
En la reanudación, el Real Murcia salió en busca de la igualada y desde el primer minuto se hizo con las riendas del choque ante un cuadro insular que solamente se dedicaba a defender el resultado para lanzar contragolpes. Iván Alonso comenzaba a ganarle la partida a los centrales amarillos y tuvo la ocasión de igualar la contienda tras un centro de Pedro León, pero su cabezazo salió rozando el poste. La respuesta amarilla no se hizo esperar y Nauzet sirvió un pase a Darino, que disparó desde la frontal y el balón salió por encima del larguero.
El técnico visitante movió su banquillo y realizó, en el minuto 63, una doble sustitución, dando entrada en el terreno de juego a dos hombres de carácter ofensivo: el gran canario Adrián y a Gallardo. A raíz de ahí, el conjunto murciano siguió dominando con más claridad a la escuadra canaria.
En el minuto 75, Pedro León lanzó una falta en la que nuevamente Iván Alonso le ganó la partida a su par, pero su cabezazo salió alto. Cuando faltaba un cuarto de hora para la finalización del choque, Alcaraz decidió dar entrada en el terreno de juego a Williams en lugar del defensa Ochoa, dejando a su equipo con una defensa de tres. Pero los amarillos, bastante espesos, apenas inquietaron la portería de Notario.
En el minuto 82, en un contragolpe canario, Nauzet se fue en velocidad de la defensa, cedió al lateral Chiqui, que se había incorporado al ataque y su disparo lejano salió fuera. Richi, en los últimos instantes tomó la batuta de su equipo sirviendo balones a Adrián y Gallardo, dos hombres rápidos que desbordaron con facilidad a la zaga amarilla, pero sus centros no encontraban los remates de los delanteros Iván Alonso y Antoñito.
A pesar de los siete minutos que descontó el colegiado de la contienda, que fueron continuos ataques del cuadro murcianista, Las Palmas resguardó el marcador y se llevó finalmente los tres puntos ante un Real Murcia que mejoró su juego en la segunda parte, pero estuvo bastante romo en ataque.
